viernes, 25 de diciembre de 2009

¡¡FELIZ NAVIDAD!!


Querid@s herman@s: ¡Paz y Bien!
La memoria de una Navidad nueva nos invita a ponernos una vez más en camino. Camino que, además de llevarnos a lo esencial de nuestra experiencia de fe y de nuestra espiritualidad, nos lleve también a responder a las exigencias más profundas de nuestra sociedad. Lo nuestro es un constante volver a empezar, o mejor, volver a los orígenes. Porque es ahí donde vuelve a resonar fuerte en nuestros corazones la llamada apremiante a nacer de nuevo, a no domesticar las palabras proféticas del Evangelio para adaptarlas a un estilo de vida cómodo. Sólo así podremos sentir desde dentro, con la fuerza liberadora del Evangelio, nuestro camino fragmentado, desigual, hambriento de sentido, tal como hicieron en su tiempo los fundadores de nuestros carismas. En su seguimiento es como seremos nosotros signos de vida legibles para un mundo sediento de un cielo nuevo y una tierra nueva.
Los personajes y signos de este tiempo litúrgico nos hablan de ponerse en camino, de búsqueda, de escucha de promesas, de estrellas guiadoras, de esperas y esperanzas, de vigías y centinelas, de fronteras y limitaciones, historias y experiencias, ternuras y soledades… como espejos en los que podemos contemplarnos y verificar nuestro estado de madurez. En la navidad Dios cruza la frontera, y se convierte en llamada para un continuo esfuerzo por cruzar fronteras que nos permitirá habitar las fisuras de un mundo fragmentado, caracterizado muchas veces por la discriminación, la exclusión y la violencia, sea física, psíquica o ideológica. Es desde estos desafíos que se ponen ante nosotros desde donde estamos llamados a llevar a cabo una seria revisión de nuestra misión evangelizadora, y a iniciar, con lucidez y audacia, caminos inéditos de presencia y testimonio.
Celebrar de nuevo la Navidad ha de significar una vuelta a lo esencial, a la infancia espiritual, la que hace posible la confianza, el abandono, la sencillez, la inocencia, la esperanza, la alegría, la ternura, la sonrisa… y el futuro, es decir: Dios. Él, que se hace ahora el más pequeño, engrandezca vuestras vidas. ¡Feliz Navidad!

Fr. Saturnino Vidal Abellán, ofm

Presidente de CONFRES-Murcia

lunes, 21 de diciembre de 2009

Motu Proprio "Omnium in Mente"


La semana pasada, el Santo Padre firmaba el Motu Proprio "Omnium in Mente", por el que modificaba varios cánones del Código de Derecho Canónico. Entre los cuales algunos hacían referencia al matrimonio de los que han abandonado la Iglesia por medio de un acto formal.
Estas personas son aquellas que de un modo definitivo han decidido desvincularse de la Iglesia bien entrando a formar parte de alguna secta o grupo en el cual su ideario vaya claramente contra la fe cristiana, como es la masonería. También se incluyen los heréticos y los que perjuran de su fe por medio de un escrito.
Todos ellos hasta ahora eran considerados como personas apartadas de la Iglesia, con lo cual si querían casarse con una persona bautizada necesitaban dispensa del impedimento de disparidad de culto, con la obligación de respetar a la parte católica el mantener y practicar su fe así como permitir que los hijos sean educados en la fe católica.
Ahora con esta modificación todo ello desaparece y se deben casar, al ser bautizados, por el rito católico manteniendo la forma ordinaria. En ningún momento como alguno ha escrito o dicho en la prensa escrita o en la radio, se consideran inválidos los matrimonios mixtos, ni se prohibe que se puedan casar.
Con lo cual se impone el sacramento del bautismo por encima de cualquier actuación, siempre que no esté sancionada por alguna pena canónica.
Si se le puede poner una pega al cambio de los cánones es que se han olvidado del can. 1071 en el que se dice que se requiere licencia para contraer a los que han abandonado la iglesia notoriamente, no se han apartado de ella con una formalidad escrita o pública, pero ni practican ni viven su fe sin embargo no hay una desvinculación real. Éstos ahora mismo para poder contraer válida y lícitamente quedan en una situación más comprometida al requerirse para ellos la licencia del ordinario del lugar, si bien su matrimonio sin dicha licencia sería válido aunque ilícito, Si embargo para quien de un modo real y efectivo abandona la Iglesia no necesitaría esta licencia, al menos en ningún sitio se exige. A alguien se le debería haber ocurrido modificar este número del c. 1071 o bien al menos explicar su contenido extendiendo esta necesidad de solicitar la licencia a todos los que abandonan la Iglesia, sea de la forma que sea.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Nuevo obispo en El Salvador


Quizás la noticia nos pueda parecer un poco lejana, y doy fe de lo lejos que están aquellas tierras. Sin embargo, cuando el obispo nombrado es un franciscano, además de compañero en las actividades del derecho canónico siempre es una alegría.

Esta alegría se ve doblada por que hasta ahora era obispo auxiliar de la querida diócesis de Santa Ana, donde Monseñor Romeo Tovar, a la sazón franciscano y formado en estas tierras de la Provincia franciscana de Cartagena, siempre ha sido muy querido por esta Provincia, y no ha dudado de extender el espíritu franciscano en su diócesis, no sólo a nivel de primera orden sino en la fundación de monasterios de las Hermanas Concepcionistas, y fomentando entre sus sacerdotes el espíritu de san Francisco.

Pero estos apuntes son para felicitar a Fr. José Elías, no sólo por ser nombrado obispo de San Vicente, sino por el buen sabor de boca que ha dejado en la diócesis de Santa Ana, en la que no ha dudado en ejercer su ministerio episcopal estando al lado de aquellos que le han llamado, sobre todo de los jóvenes. Me consta de buenas y cercanas fuentes que era muy querido por los jóvenes con los que ha compartido muchas actividades organizadas por el Equipo Diocesano de Pastoral.

Todo ello le ha llevado a que el mismo clero diocesano pensase en la posibilidad de que fuera él quien sustituyera Monseñor Romeo, pero por lo visto a Monseñor Romeo le queda mucho tiempo y Monseñor Elías iniciará un nuevo periplo pero a buen seguro con el mismo espíritu de Pastor cercano y franciscano. Felicidades a Monseñor Elías y a la diócesis de San Vicente. Y sobre todo a Monseñor Romeo por el buen ojo que está teniendo con sus auxiliares.

domingo, 6 de diciembre de 2009

La Fe del Pueblo Centroamericano

En este mes de noviembre he tenido la gran fortuna de poder visitar nuevamente a los hermanos franciscanos de la Fundación del Santísimo Nombre de Jesús de Guatemala y Costa Rica, pertenecientes jurídicamente a la Provincia Franciscana de Cartagena (España).
Visitar aquellas tierras invita al regresar a hacer un doble análisis tanto religioso como social. A nivel eclesial, siempre llama la atención la fe de unos pueblos que sienten su ser católico como elemento de distinción y motivo de orgullo. Las celebraciones están llenas de participación de los laicos donde sin remilgos participan en los cantos, en las moniciones a las lecturas, sabiendo ocupar su lugar en cada celebración pero haciendo que sea una celebración de toda la comunidad.
Una de las cosas que siempre me han llenado al visitar aquellas tierras es la facilidad y confianza que tienen en la celebración del sacramento de la reconciliación, no tienen problema en acercarse a la confesión, no como un mero rito sino necesitados de la gracia de Dios para poder participar plenamente de la celebración eucarística comunitaria.
Pero como decía también se debe hacer un análisis social, en una tierra rica que sin embargo se ve inundada de pobrezas y delincuencia. Entre Costa Rica y Guatemala, las diferencias en la manera de afrontar esa violencia son palpables.
Se observa que lo que hace a la juventud resistirse a los mundos “fáciles” de la droga y del dinero de la extorsión es la educación. Se echa de menos en Guatemala un sistema educativo fuerte y que llegue a todos los niveles de la sociedad. De nuevo, nos damos cuenta que los gobiernos no llegan a cubrir estas necesidades, y sigue siendo la Iglesia la que, como hizo en un principio, abre los campos educativos para niños, jóvenes y universitarios.
Es increíble que se hable del hambre en Guatemala, cuando esa tierra pueda estar dando continuamente cosechas. Con los programas de desarrollos de cultivo que se llevan a cabo supondría varias cosechas, si bien la alimentación básica requiere un cambio, si no de productos si del modo de plantarlos y de la manufacturación de los mismos.
El progreso de estos pueblos centroamericanos llegará únicamente cuando ellos mismos se crean que son capaces de vivir, no sólo el día a día sino que son capaces de construir el futuro. Es cierto que es otra cultura y otra mentalidad bien distinta a la europea, pero el cambio social vendrá cuando ellos se lo crean, y como siempre tendrán a su lado a los hermanos franciscanos, que están dejando allí su vida, y estarán siempre al lado del pueblo, lo bueno es que ellos lo saben.
(Publicado en Religión Digital el 5 de diciembre de 2009)

martes, 24 de noviembre de 2009

¿Cuanto vale una vida?


Al terminar la celebración de la Eucaristía el pasado domingo, tuve un rato de diálogo con el coro que me había acompañado en la celebración. Eran unos diez entre jóvenes y mayores, pero con ganas de animar la liturgia y la celebración.

Hasta aquí nada fuera de lo normal en estas tierras. La novedad surgió en el diálogo, cuando tras las preguntas de rigor, ¿si estoy a gusto? ¿si me gusta esta tierra?, surge la coletilla que la directora del coro dice: "a pesar de todo lo que pasa". Por que la verdad en esta bendita tierra de Guatemala, la vida no vale nada.

Es más, vale lo que un celular, el lunes sin ir mas lejos murieron 14 personas por la violencia callejera. La semana pasada tras la celebración de una vigilia con los cofrades al regreso a casa a uno de los jóvenes lo mataron, simplemente para quitarle el móvil.

Por eso a esta buena gente, como diría san Francisco, no sólo hay que animarles espiritualmente, sino, y en ocasiones es más difícil, el animarles a que ellos pueden cambiar su país socialmente.

Son de un modo especial los jóvenes los que deben vencer y superar la tentación del dinero fácil que les da la droga o la delincuencia y formarse, un pueblo que se forma, que estudia, es un pueblo que avanza socialmente.

La Iglesia en este sentido lo tiene claro, y fomenta y cuida los espacios educativos, pero sin el apoyo de los estados, es muy difícil conseguir que esto avance.

Me marcho de esta tierra como siempre muy contento de haber pasado unos días en ella. Por haber descubierto que se vive la fe desde la pobreza material, pero desde unos corazones plenos de felicidad. Sobre todo por que me he vuelto a encontrar personas de todas las edades que no sienten vergüenza de ser católicos y de proclamarlo.

lunes, 23 de noviembre de 2009

AMORES MAYAS


En estos días en los que he tenido la gran fortuna de visitar los restos arqueológicos de la cultura maya en el Tikal, zona del Petén al norte de Guatemala, me han hablado de los amores mayas.
Son cuatro estos amores, el primero es el de llamar al ser sobrenatural el "Creador" es creador porque todo lo que nos rodea desde el cielo, la tierra y el inframundo, el mundo subterráneo, como le dicen es obra de un ser superior cuya gran característica es el de haberlo creado todo. A él por tanto se le debe adoración y gratitud.
Pero hay un segundo amor para la cultura maya, es el amor a uno mismo, no en el sentido egoísta sino en el sentido de aceptarnos tal y como somos, no estar continuamente deseando lo que no somos y posiblemente nunca vayamos a ser, eso supondría en ocasiones perder toda una vida en ir detrás de fantasmas. El hombre debe amarse para sentirse parte de la creación y ser feliz, que es la meta y origen de toda la vida.
El tercer amor maya es el amor a los demás. Todo lo anterior sería egoísmo si sólo nos quedamos en nosotros y como mucho en nuestros diocesillos. La cultura maya al menos en su periodo clásico no es la guerrera que conocemos, invita a aceptar a los demás para vivir la fraternidad universal, únicamente desde la convivencia pacífica con los demás es como podemos sentirnos en paz con la creación y alcanzar un grado de espiritualidad y de comunión entre los hombres.
El cuarto amor maya hace referencia a la aceptación del tiempo que nos toca vivir, se trata de ser felices con lo que tenemos en cada momento con nuestro entorno, con la naturaleza y el espacio vital que el creador nos ha regalado para que seamos capaces de hacerlo fructificar.
Toda vez que uno escucha al abuelo explicarte los amores maya, uno piensa que bien se llevaría con san Francisco, y es que se trate de ser relativista o de decir que todo es lo mismo, no es eso, es únicamente que si alguién llamo a Dios Padre como creador ese fue el santo de Asís, que nos enseñó que solo se puede llegar a amar a Dios si nos aceptamos como somos y desde lo que somos con nuestras limitaciones pero también con nuestras grandezas.
Que es el único camino para entregarnos a los demás y mostrarles que alguien grande los acompaña y lo ha creado para ser testigos de su amor.
Y sobre todo que sólo aceptando lo que nos toca vivir en cada momento es como se puede afrontar la vida y los acontecimientos de la misma con mayor alegría y saber hacerles frente no desde el agotamiento sino desde la esperanza.

martes, 17 de noviembre de 2009

Ya estamos en Guatemala


El lunes con gran dolor del alma dejamos a los hermanos de Costa Rica para ir a La Recolección en Guatemala.
Llegar a esta tierra es incomparable a nada de lo visto hasta ahora, ya me sucedió hace cinco años y me pasa ahora. Aquí la gente es mayoritariamente indígena, se descubre que se respetó más a las personas que en otras partes de latinoamérica, no cabe duda que aquí estuvo Capitanía General y se respetaba algo más las leyes.
Sin embargo también se observa que la pobreza es mucho mayor, solo uno tiene ocasión de recorrer un mercado y ve como el alimento básico es el maíz y la fruta y verdura. Es un pueblo que con la riqueza que tiene esta tierra podría avanzar enormemente, pero en la forma de ser de ellos, se encuentra también el conservadurismo y el vivir el día a día sin pensar mucho en el mañana.
De todas formas, como suele suceder cuando uno no tiene casi nada, es un pueblo muy acogedor y enseguida uno se siente a gusto. Demuestran una gran fe y un deseo de que la compartamos con ellos, quizás también como consecuencia del expansionismo de las sectas que están creciendo de un modo considerable en estas tierras guatemaltecas y en toda Centro América en general.
Como dice el P. Leonardo, estar en Guatemala es siempre un regalo de Dios, y como los buenos regalos sólo cabe disfrutarlo.

domingo, 15 de noviembre de 2009

La fe en estas tierras


Un fin de semana en la parroquia franciscana de San Antonio en el barrio de Guadalupe en San José de Costa Rica, cuando llegas de Europa es llenarte de la religiosidad y la fe que viven todavía en estos pueblos americanos.

Las celebraciones de la Eucaristía son pausadas con cantos, con moniciones y todo celebrado conforme al ordo de la liturgia, sin extridencias y respetando la celebración. A la hora de la comunión hay seglares preparados y nombrados para ayudar al sacerdote en la administración, os recuerdo que las Iglesias aquí son inmensas y perfectamente puede haber 1000 personas comulgando.

Pero si hay algo que ya me llamó la atención en mi última visita y lo vuelve a hacer ahora es la celebración del sacramento de la penitencia. Sentarte en el confesionario aquí es sentarte para horas, no los 15 minutos que acostumbramos en España. Los fieles se confiesan y son de todas las edades, y en todos ellos se observa la fe que viven, y sobre todo la dificultad que tienen para vivir esa fe en medio de la sociedad reinante.

A pesar de la dificultad, que no difiere mucho de la española, sin embargo son conscientes de que tienen una fe que defender y vivir, saben que el pecar es alejarse de Dios y esa situación les hace llorar, en el sentido estricto de la palabra. Y cuando uno ve llorar a hombres y mujeres por que han fallado en su vida católica, la verdad es que te deja pensando que gaitas estamos haciendo en España con nuestra fe.
Los católicos en estas tierras no son perfectos, pero aquí todavía viven la fe y esa fe necesitan que por parte del clero se vea fortalecida, porque es muy fácil abandonar la fe por los "encantos" de la sociedad consumista, pero además cuando en estas tierras se da el avance de las sectas hace que se sienta mayor la necesidad de acompañar a los fieles en su vida de fe.
Además escuchar al pueblo te ayuda no sólo a conocer su fe sino la realidad del pueblo en el que esta presencia franciscana se encuentra presente.
La foto es de la fachada de San Antonio en San José de Costa Rica.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Los hermanos de la Fundación


Hoy me permito en esta mañana de sábado rendir un pequeño homenaje a los pocos hermanos que permanecen en la Fundación del Santísimo Nombre de Jesús. Son ya pocos y muchos ya avanzados en la edad, pero para los hermanos de la Provincia Franciscana de Cartagena son un referente de la actividad misionera que la misma en sus años de existencia ha llevado a cabo.

Cuando uno llega a estas tierras es el momento para descubrir lo que se ha llevado a cabo no en las grandes ciudades sino en los pequeños pueblos donde no llega nada ni nadie y las gentes viven el día sin pensar en el mañana.

Nuestros hermanos no sólo llevaban la Palabra de Dios y les anunciaban a Cristo, después de horas montados en mulos y por caminos, si es que los había,totalmente desgastados. Cuando llegaban levantaban las Iglesias para poder celebrar la Eucaristía, cuantas de estas iglesias ahora tienen placas en la puerta agradeciendo a los hermanos franciscanos el que estuviesen allí y con ellos y les ayudasen a poder vivir la presencia de Cristo, y los colegios, porque lo más importante para vivir una fe desde la persona es el formar y educar a las personas y esto los hermanos no lo olvidaban.

Algunos de los hermanos que aquí están llevan en estas tierras centroamericanas más de 50 años, toda la vida, por ello cuando te hablan de Nicaragua o del Salvador lo hacen sintiendo la tierra y a las gentes como parte de su propia familia. Casi se emocionan más al hablar de Diriamba que de su huerta murciana.

La enfermedad y los años no pasan en balde y estos hermanos se merecen todo el reconocimiento de la Provincia para ellos, así se sienten y de esta manera nos reciben con un hondo sentido de agradecimiento el que estemos pasando unos días con ellos y les acompañemos en su vida diaria. lo que ellos no saben es que el ejemplo y la compañía nos la dan ellos con su acogida y toda su vida franciscana.

Los hermanos de la fotografía son los de la Comunidad de San Antonio en San José de Costa Rica.

viernes, 13 de noviembre de 2009

Las pateras de los cafetales


Si en estas tierras hay algo maravilloso que te deja con la boca abierta cuando la visitas no es otra cosa que la naturaleza. Aquí en una tierra volcánica, con un clima maravilloso el ver todo frondoso ciertamente invita a alabar al Creador.


Hoy he visitado un cafetal, y como decía es impresionante como la naturaleza puede dar tanto fruto, y a la vez ser un motivo para contemplar la grandeza y el esfuerzo de un pueblo que sabe aprovechar las condiciones ambientales para superar la pobreza y crecer no sólo económicamente sino también humanamente, por que no cabe duda que Costa Rica, a diferencia de sus países vecinos, ha sabido luchar contra la pobreza desde la formación integral de la persona.


Sin embargo en medio de tanto esplendor y alabanza al Creador no dejan de aparecer las oscuridades de la vida. En estos tiempos en que se inicia la recogida del café aparecen las pateras de estas tierras llenas de Nicaraguenses que abandonan su país llenando autobuses con la esperanza de alcanzar un poco de dinero con el que dar de comer a sus familias. Sin embargo al ser ilegales en la frontera se los para y se les devuelve a su tierra con una esperanza rota.


También estas pateras de cuatro ruedas se pierden en el estrecho, sin ir más lejos el otro día uno de estos autobuses se salió de la carretera y murieron 20 de sus ocupantes, personas anónimas en una tierra extranjera que dejan su vida por una ilusión.


Esta situación debe llevarnos a pensar que la pobreza tiene los mismos rostros en todos los continentes y siempre afecta a los vecinos más necesitados.


miércoles, 11 de noviembre de 2009

Desde Costa Rica

Comienzo lo que me gustaría fuese la crónica de la visita a los hermanos de la Fundación del Santísimo Nombre de Jesús en Centro América, que está realizando el Ministro provincial y que, como a nadie le amarga un dulce me vine con él.
Llegar hasta estas tierras no deja de ser cansado, por que mira que está lejos, pero en un viaje de tantas horas da lugar a poder hablar con las personas que te acompañan en el avión, y conocer un poco más las realidades de las gentes de estos países.
Así me encontré con salvadoreños y hondureños que regresaban de España a pasar unos meses en su tierra, a cada uno le iba de una manera, algunos estaban bien situados en España con trabajo fijo y contentos y otros que regresaban a su tierra cansados de no haber encontrado en España lo que tanto soñaban.
Puede parecer ilusorio pero los que viven en pequeñas ciudades o pueblos son los que se encuentran más integrados y felices, sin embargo los que se quedaron en las grandes ciudades se encuentran vacíos y solos.
Sin embargo, la pobreza es inmensa en estas tierras y eso que Costa Rica es el paraíso al lado de los otros países de Centro América, sin embargo aquí también se descubre que la delincuencia es un mal que se va extendiendo por estas tierras y destrozando lo que siempre fue una tierra acogedora. Las maras, los narcos de los países cercanos, se aprovechan de un estado idílico sin ejercito y con una policía que estaba preparada más que para la delincuencia a gran escala para dirigir el tráfico.
Sin embargo amanecer en estas tierras es una bendición, todavía ves gente amable en las calles cuando he ido a celebrar la Eucaristía y cuando por la ventana de la capilla ves las montañas verdes y la grandeza de la obra de Dios.

viernes, 23 de octubre de 2009

Inicio del Curso en CONFER-MURCIA



Querid@s herman@s: ¡Paz y Bien!
El don del Evangelio está en la raíz de la vida religiosa. En el Evangelio se escucha la voz de Cristo y de esa escucha brota la riqueza y diversidad de los carismas de la vida religiosa en la Iglesia y para el mundo. Cada comunidad religiosa se descubre llamada a anunciar aquello que vive, convirtiéndose de esa manera en evangelizadora. El gran claustro de la vida religiosa es el mundo, y con él se tiene una obligación: compartir el Evangelio. Las múltiples opciones que la vida religiosa ofrece son el fruto de una total confianza en la Providencia, actitud que otorga la libertad para andar por el mundo sin ataduras.
El reconocimiento que hace la Iglesia de la santidad de algunos de sus hijos e hijas –y en este mismo mes hemos sido de nuevo testigos de ello- equivale a la propuesta de modelos que imitar mientras recorremos los caminos del mundo como evangelizadores con el corazón vuelto al Señor. Vivir entre las gentes implica una actitud de simpatía por el mundo, en el sentido no de acomodamiento a él, sino de mirada positiva sobre los contextos sociales, culturales y religiosos que nos trae el cambio de época en que vivimos. Y esto sólo es posible en el ejercicio del amor.
Decía el santo Cura de Ars, cuya memoria tendremos presente durante este curso, que “el sacerdocio es el amor del corazón de Cristo”. Y santa Teresa del Niño Jesús, con cuya memoria hemos entrado en el mes de octubre, esto otro: “en el corazón de la Iglesia yo seré el amor”. La vocación a la vida religiosa es una llamada a ejercer el sacerdocio del amor, que, otorgado a todos por igual en el bautismo, se expresa en una rica diferencia de carismas, regalo de Dios a la Iglesia y a la humanidad.
P. Saturnino Vidal Abellán, ofm

lunes, 12 de octubre de 2009

PUENTE DE ESPERANZA


Publicado en Religión Digital el 12 de octubre de 2009

En el día de la Hispanidad, día que se nos llena la boca al hablar de los pueblos hispanos, me van a permitir que les hable de sor Emilia González. Ella es hermana de la Congregación Hermanas Apostólicas de Cristo Crucificado. Lleva cinco años en República Dominicana, en un pequeño pueblo que se llama Padre las Casas, situado en la frontera con Haití, la zona más pobre de un país muy necesitado.

Su labor evangelizadora la realiza ella junto a otras dos hermanas anunciando a Cristo y tratando de promover el desarrollo de zonas ancladas en la pobreza. Y cuando hablamos de pobreza, estamos hablando de comer una vez al día un plato de arroz, de vivir en chamizos de paja y en las montañas, lomas llaman ellos, abandonados de toda ayuda estatal.

Allá solo llega la Iglesia, y como ella misma nos dice gracias a su obispo D. José Gullón de la diócesis de San Juan de la Maguana, que cuando ha de hacer la visita apostólica no duda en montarse en una mula o subir andando con ellas a visitar a las comunidades, a celebrarles la eucaristía y a interesarse por la necesidades humanas y tratar de ayudar en aquello donde llegan las posibilidades.

La hermana Emi, como se la conoce allí y aquí, vivió en el 2007 como las tormentas “Noel” y “Olga” arrasaban los caminos, desbordaban el rio, de tal manera que esas comunidades se quedaban sin atención ninguna. Comienza entonces la idea de llevar adelante la construcción de un puente de hierro y cemento que permita, ante las inclemencias del tiempo, el poder llegar con camiones de alimentos o de asistencia sanitaria a quienes se quedaban aislados a causa de las tormentas.

No cabe duda que encontró ayudas principalmente de instituciones solidarias como Caritas, Fundasep, etc. Pero fue junto con el obispo con quien la ilusión de empezar a construir el puente se está haciendo realidad. Las máquinas las ha puesto la diócesis y los trabajadores lo están haciendo en su mayoría a cambio de la comida diaria.

Pero hace falta dinero, y en estos días de la Hispanidad es un buen momento para ser solidarios con nuestros hermanos más pobres, por eso podemos ayudar a tantos religiosos que vuelcan su vida por hacer puentes de esperanza para que Cristo llegue a aquellas gentes, que viven su fe llena de esperanza en medio del abandono y la pobreza. (ayudaalpuente@yahoo.es)

miércoles, 9 de septiembre de 2009

NECESIDAD DE DIÁLOGO CONFER Y CEE

Publicado en Religión Digital el 9 de septiembre de 2009

A mediados del tórrido mes de agosto, hablaba de la necesidad de retomar posturas convergentes y dialogantes entre CONFER y la Comisión Episcopal de Vida Consagrada, de la Conferencia Episcopal española.

Para retomar el diálogo y que éste sea fluido y eficaz, la base del mismo debe estar en el reconocimiento mutuo de que todos somos Iglesia, estamos en la misma barca y debemos navegar en unión para poder mirar hacia adelante y que nuestra vida sea testimonio de nuestra fe.

Para partir, de esta base hay dos realidades que cada una de las partes debe asumir: en primer lugar lo que hace referencia a la “justa autonomía” de los religiosos, otorgada por el Código de Derecho Canónico en su c. 586, y que muy bien conoce el presidente de la comisión episcopal, al haber profesado la Regla de San Francisco, y no serle extraña la vida religiosa.

Afirmar este principio es la consecuencia lógica de tratar de hacer realidad la propia naturaleza de los Institutos, lo cual les lleva a ser portadores de un propio patrimonio carismático, que sin esta “justa autonomía” no podrían disponer de una adecuada libertad para tutelar y desarrollar sus propias reglas y constituciones buscando salvaguardar su propia identidad en el conjunto de la vida eclesial.

La autonomía es definida como “justa”, porque mira toda la vida del Instituto, sobre todo en relación a su gobierno, con lo cual la necesidad de tener una propia disciplina se legitima gracias a esta justa autonomía reconocida, a su vez, por la autoridad legislativa.

Tal autonomía, debe venir reconocida como tal por el Ordinario del lugar, con la misión y obligación de cuidarla y vigilar para que se lleve a cabo. No estamos en definitiva ante una concesión administrativa por parte de la autoridad eclesiástica, sino que es un derecho nativo de cada Instituto. Toda injerencia indebida en la vida interna de los Institutos debe ser absolutamente impedida por el mismo Obispo diocesano.

La segunda realidad va unida a ésta y es que dicha autonomía no es indiferencia ante la realidad eclesial, sino colaboración, entre otras cosas, en la pastoral. Los religiosos no pueden llevar a cabo una pastoral contraria a la situación de la Iglesia local donde están presentes, como tampoco puede ser contraria a su carisma, por ello es tan importante el intercambio de pareceres (c. 678§3).

Es necesaria la comunicación entre los Ordinarios de lugar y los Superiores mayores, de cara a evitar malentendidos y fomentar una verdadera cooperación (c. 680), que lleve a una colaboración respetuosa y en la búsqueda de reflejar una misma actitud de compromiso eclesial.

En el nuevo curso convendría restablecer un diálogo fluido en el que se superen rencillas o aspiraciones personales, de cara a establecer respuestas convergentes a situaciones que afectan de la misma manera a ambas entidades. Todo ello conduce a un necesario servicio a la Iglesia que tanto Superiores mayores como Comisión episcopal deben cuidar y, me atrevería a decir, tienen la gravísima obligación de llevar a cabo.

Fr. Miguel Ángel Escribano Arráez, ofm
Secretario General del Instituto Teológico de Murcia OFM

sábado, 8 de agosto de 2009

¿Que pasa con CONFER?

(Publicado en Religión Digital el día 8 de agosto de 2009)
Iniciábamos el período veraniego con la noticia de algunas dimisiones en los órganos de gobierno de CONFER, como entrabamos en verano, aquello ha quedado en espera, hasta el inicio del nuevo curso. Sin embargo, la situación que vive CONFER nos plantea a los religiosos, una cuestión: ¿Verdaderamente CONFER nacional representa a los religiosos?.
Podemos decir que la Vida Religiosa en España no está en su mejor momento vocacional, ni aquí ni en toda Europa, pero eso no significa que dicho estado de vida haya perdido su puesto en la sociedad o en la Iglesia.
Muchos son todavía los colegios cuya entidad titular la siguen manteniendo los religiosos, y no podemos olvidar la gran colaboración que los centros dan a los padres en la educación no sólo intelectual sino en valores y comportamientos ciudadanos y cristianos.
En un período de crisis como el que vivimos son los comedores sociales, llevados en su mayoría por religiosos, en muchos casos sin ayuda de los gobiernos y municipios, los que están saciando el hambre de muchas personas que de otra forma no podrían comer nada al cabo del día, y no hablo solo de emigrantes, sino vecinos nuestros de toda la vida.
Si hablamos de ayuda a drogadictos o enfermos terminales somos los religiosos los que, con la ayuda de muchos voluntarios seglares, dedican muchas horas del día a ayudar a salir de la droga y la marginalidad a muchos jóvenes y mayores.
Hay otros muchos ejemplos de acción social que si no fuesen por los religiosos, pocos en número pero grandes en trabajo, llevan a cabo, y hacen que la Vida Religiosa esté presente en medio de los sufrimientos de nuestro mundo.
Pero la Vida Religiosa no es sólo acción social, no es una ONG, es presencia viva de Cristo Resucitado. Todo lo anterior lo hacen los religiosos porque han entregado su vida al seguimiento de Cristo, oran en comunidad, viven con ella, y se entregan al mundo desde ella. Es esa oración y esa vida la que diferencia a los religiosos de una ONG.
Las iglesias de los religiosos, en su mayoría, son lugares donde la liturgia de la celebración de la Eucaristía, se hace desde la sencillez y el bien hacer. No podemos olvidar que la liturgia es para el pueblo y no necesita ni de grandes vestimentas o celebraciones de espaldas al pueblo y ajenos a él, ni de un relativismo excesivo donde se confunda al sacerdote con el pueblo. La liturgia que el pueblo pide es la que se celebra en la sencillez pero a la vez se prepara bien todos los momentos de la celebración donde se recibe a Cristo en la Eucaristía. En muchos templos de religiosos se celebran de esta manera y los fieles acuden a ellas, e incluso se confiesan.
Esta es la Vida Religiosa, por eso surge la cuestión de si CONFER representa a este estado de vida. Debería serlo, y sin embargo está muy lejos de representar a los religiosos. No se trata de decir que desde los obispos pretenden dividir CONFER, hay que recomponer la institución desde su interior, por los mismos religiosos, hay que escuchar a las entidades regionales para conocer sus realidades, tanto las que se hacen bien como aquellas donde se encuentra trabas para poderlas realizar. No tienen la misma facilidad un colegio religioso en Murcia que en Andalucía o Castilla la Mancha.
CONFER no puede ser únicamente un órgano donde se hagan reflexiones personales que en muchos casos son ajenas al 75 % de los religiosos. La Iglesia necesita de la Vida Religiosa, pero al revés también, por tanto es necesario volver al diálogo con la cabeza de la misma. Se necesita revitalizar la comisión mixta, de cara a evitar lamentables situaciones como las que se han vivido con “Educación para la ciudadanía”, donde faltó sobre todo diálogo.
En definitiva, CONFER necesita un nuevo impulso y desde una visión positiva una importante reforma para ser reflejo de lo que es la Vida Religiosa en España.

lunes, 20 de julio de 2009

Nuevo Obispo en Murcia


Hoy nos hemos encontrado con el nombramiento del nuevo obispo de la Diócesis de Cartagena, desde la sierra de Alcaraz, en Masegoso donde me encuentro de vacaciones no puedo dejar de escribir unas líneas para alegrarme de su llegada como Pastor a la diócesis a la que pertenece por nacimiento y ministerio sacerdotal.

Conocí a D. José Manuel en mi primer destino en Lorca, cuando él era Vicario episcopal de aquella zona, siempre me llamó la tención su dedicación a los sacerdotes de Lorca y su entorno, siempre estaba cercano a ellos a sus vicisitudes y sus alegrías.

Por ello, creo que es el mejor Obispo que podía llegar a la Diócesis, el anterior Pastor se despedía pidiendo a su clero que se mantuviesen unidos, ahora llega un conocedor de este clero y con una gran tarea la de hacer del clero de Murcia un clero unido, un clero diocesano. Si alguien puede llevar a cabo esa tarea desde luego no es otro que D. José Manuel.

Me alegro con su venida y me alegro sobre todo porque deseo y rezo para que sea un buen Pastor para el pueblo diocesano de Murcia, y sobre todo para que sea quien una y supere los partidismos que otros habían sembrado y que dividían una diócesis grande y con un gran potencial de fieles que viven su fe.

lunes, 13 de julio de 2009

Estos del fútbol están locos



Quien me conoce sabe de mi pasión por el fútbol, me gusta, me divierte y los colores del Albacete Balompie los he llevado allá donde he ido, sin llegar a hacer locuras ni tonterías, pero orgulloso de mi equipo.


Pero lo que este verano estoy viendo, me hace pensar que o bien el mundo está loco, y estos del balompie están mucho peor.


La última noticia es que los señores de la FIFA van a prohibir las prácticas religiosas o para ser más exactos los gestos religiosos a los jugadores, que vaya escándalo provocaron los jugadores de la Selección Nacional de Brasil, cuando ganaron el último título, los cuales agrupándose en el centro del campo dieron gracias a Dios por la victoria conseguida. ¡Todo un alarde de fundamentalismo!. Y no olvidemos al jugador del Sevilla c.f. Kanouté que cuando marca un gol eleva sus oraciones a Ala, porque es musulmán. No creo que ningún aficionado nervionense se haya escandalizado.


Sin embargo, estos señores de la FIFA, consideran que mezclar fútbol con religión es fundamentalizar, perdón por la palabra, el deporte. Se olvidan estos señores que quien juega al fútbol o se divierte viéndolo no puede quitarse ni la cabeza ni sus sentimientos, no son máquinas, son personas, y en la alegría o la adversidad muestran lo que son. Y si nos empeñamos en decir que el fútbol debe fomentar el trabajo en equipo, educar en los valores, enseñar al niño a no verse superado por la frustración de la derrota, todo ello debe ayudar a que el niño supere el individualismo y el egoísmo.


La religión, tener fe no hace mal al deportista, todo lo contrario le ayuda a respetar al contrario, y eso es lo que se debe fomentar. Estos del fútbol se vuelven locos y hacen que a uno se le frene el gusto por el fútbol, y acabemos echando en falta las eras donde jugábamos cuando eramos críos.

martes, 7 de julio de 2009

ENCUENTRO FRANCISCANO DE FAMILIAS


En esta época del año son muchas las actividades que se llevan a cabo con niños y jóvenes, que si campamentos, actividades urbanas, incluso esquiar en el centro de Madrid.

Lo importante es que se sepa que se hacen, así el reclamo publicitario llega a los límites de proponer un campamento sin Dios. No se el éxito que habrá tenido, pero desde luego no han sido nada originales, porque tanta insistencia en hacer cosas sin Dios es la fiel demostración de no poderse quitar a Dios de la cabeza.

Pero yo os voy a hablar de una actividad que se va a llevar a cabo a lo largo del próximo fin de semana, para ser exactos del 10 al 13 de julio en un paraje rural cercano a Cehegín (Murcia). Es un encuentro de familias.

Es importante que nos mentalicemos que no se trata de mandar a los niños y jóvenes a entretenerse y dejar a los padres unos días tranquilos. Se trata que padres e hijos, algún año hasta abuelas han venido, compartan una experiencia distinta. Compartir con otras familias el quehacer diario, jugar en el monte, y bañarse en la balsa o el río, sin todas las medidas de salubridad posible, pero con todo el cariñó y las ganas de divertirse del mundo. Pero sobre todo la de rezar en familia, orar todos los días y celebrar juntos la Eucaristía. Y ello sin prisas saboreando la presencia y el amor de Dios Padre en el amor de unos padres a sus hijos y de sus hijos con los padres. Descubrir que vivir, educar, compartir y rezar son elementos de una misma vida que se aprende en familia y desde la familia se da al resto de la sociedad.

Todo ello en un ambiente propio franciscano, espontáneo y a la vez bien preparado y organizado. Que sean unos días muy familiares y el próximo año en lugar de 20 familias sean más las que se quieran unir.

lunes, 29 de junio de 2009

Proyecto Hombre. Luchar por la Persona


Proyecto Hombre, desde hace más de 20 años, viene apostando por ofrecer caminos de esperanza a personas que han tenido problemas con las drogas y a sus familias. Es una apuesta que busca no sólo que estas personas dejen de consumir drogas; lo que se busca, principalmente, es un cambio personal profundo que le permita vivir libremente sin tener que recurrir a las drogas en ningún momento.

La apuesta más fuerte que hacemos en nuestro compromiso desde Proyecto Hombre es luchar por la persona.
Estamos convencidos de que todo hombre, por encima de su historia, sus actos, sus errores, sus contradicciones, etc., es un hombre, una mujer, por la que merece la pena luchar; todo hombre, toda mujer, es un ser con la que merece la pena comprometerse. Y esto lo mostramos desde el primer momento en que los chicos entran por la puerta de nuestro centro. Es importante que la persona se sienta acogida, comprendida en su dificultad, respetada en sus miedos, escuchada en sus angustias y preocupaciones y acompañada en sus decisiones y proyectos. Al terminar el largo proceso de recuperación que dura más de un año y medio, le pregunté a los chicos que recibían el alta terapéutica qué era lo que más les había ayudado en todo el programa, uno de ellos me dijo que, de todas las experiencias profundas que había vivido con nosotros, lo que más le había impactado era el abrazo que le dio la terapeuta que lo atendió al terminar la entrevista el primer día que entró en el programa.
Por tanto el lugar específico donde se sitúa Proyecto Hombre no es otro que la persona, pero la persona como protagonista, como sujeto activo y capaz de trasformar su vida que en muchas ocasiones presenta oscura, triste y sin salida, en una vida de esperanza, de luz, de gozo y felicidad.

Junto a la persona como lugar de compromiso, nuestro programa propone el encuentro como el contexto en el que se debe descubrir y desarrollar las capacidades que cada uno. No somos islas, estamos llamados al encuentro, y desde el encuentro, vamos descubriendo nuestro proyecto de vida.
Este encuentro tiene rostros concretos:
- Los terapeutas profesionales que no sólo transmiten conocimientos y técnicas, sino que, sobre todo, ofrecen apoyo y cercanía.
- Los voluntarios que son una escuela de valores intensiva, donde se aprende a vivir desde la gratuidad, el compromiso desinteresado, y rompe el mundo totalmente egoísta e interesado que genera la droga.
- La familia se manifiesta, a lo largo de todo el proceso, como el pilar que siempre ha estado ahí a la espera de que el hijo, la hija, el marido, la esposa, etc. descubriera todo lo que la necesita y el mucho bien que se ha perdido.
- Los compañeros que han vivido experiencias semejantes a las tuyas con las drogas y que están, igual que tú, comprometidos en un proceso de cambiar la vida. Los compañeros son el espejo donde te ves reflejado con más claridad: el ellos puedes percibir todas las realidades que te asustan de ti mismo y, de esa manera poder afrontarlas. Los compañeros son los que te muestran que “es posible”, que lo que tu ansías no es un sueño imposible, sino una realidad por desarrollar.

En este clima de confianza y cordialidad, de encuentro es donde la persona se siente invitada a abrir su vida sin miedo a ser violado/a, sin miedo a que los demás se aprovechen de sus debilidades, sin miedo a perder nada; y es en ese momento en que la persona se abre con confianza, donde se produce el encuentro que libera, que recupera. Es a partir de este momento donde de verdad, de total sinceridad con uno mismo, donde se puede ir dando pasos para curar las heridas del pasado, vendar la llagas, tomar con delicadeza la propia vida e ir reconstruyéndola con cariño.

Proyecto Hombre se ha convertido a lo largo de estos años en una escuela de vida que ha servido de apoyo a muchos jóvenes que por sentirse desolados y desorientados cayeron en el mundo de la droga.
A lo largo de este tiempo ha ofrecido un espacio de salvación para muchas familias que han visto destrozado su universo existencial por que la droga entró por su ventana.
Por último, se ha convertido, para todos los que de una u otra manera hemos compartido este compromiso, en una experiencia enriquecedora y transformadora. Para mí ha sido una oportunidad de conversión, de saber acercarme a todos los hombres y mujeres sin discriminación, sin distinguir entre bueno y malos, merecedores o no merecedores del amor, me ha servido para ser capaz de luchar por la PERSONA, trabajar desde las posibilidades que toda persona tiene, la capacidad amar que todo hombre y mujer posee. Me ha permitido ahondar un poco más en la grandeza que supone comprometerse con el otro como prójimo, de descubrirlo como hermano y, junto a él, poder hacer realidad el gran compromiso cristiano de amar a Dios en el hermano y al hermano en Dios.

Fr. Jesús Hernández Martín, ofm
Presidente Nacional de Proyecto Hombre

miércoles, 24 de junio de 2009

Finis Coronat Opus



Nuestro Capítulo general ha llegado a su fin. En sentido inverso, desde este momento, cada uno de los hermanos toma el camino de vuelta a su lugar y fraternidad. En sentido profundo, no nos vamos igual que vinimos. Una honda experiencia de fraternidad nos devuelve a nuestra casa con la conciencia un poco más firme de ser anunciadores de la Palabra de Dios al universo mundo. Las fronteras geográficas que vamos a cruzar en nuestro retorno son signo de las otras fronteras que nos sentimos llamados a evangelizar, muchas de ellas imprecisas y difíciles de delimitar, otras muy concretas y que son fuentes de discriminación, segregación y violencia. Evangelizar implica tratar de hacer porosos nuestros límites para permitir el flujo de la intercomunión y la intercomunicación.


En la diversidad que nos caracteriza hemos reconocido la feliz noticia de un Dios siempre fecundo. Nuestra fraterna diversidad es para nosotros un paradigma del objetivo de nuestra misión: hacer de toda criatura un don de fraternidad y para la fraternidad. Que nuestra sociedad actual reconozca en la figura de san Francisco, el poverello de Asís, al hermano universal, se convierte para nosotros en un desafío y un compromiso de profunda renovación para ser fieles a la gracia de los orígenes y así ofrecer la propuesta de un mundo hermanado en las ricas y sanas diferencias.


Bajo la maternal mirada de nuestra Señora Santa María de los Ángeles, dejamos este querido lugar de la Porciúncula para retornar a nuestros claustros del globalizado mundo, portadores del don del Evangelio.



Fr. Saturnino Vida Abellán, ofm

viernes, 19 de junio de 2009

La Iglesia acoge nuestro modo de vida


A media tarde iniciamos la subida desde Santa María de los Ángeles a la basílica de San Francisco, en Asís. Un corto camino que se hace signo de ese otro itinerario de nuestra Orden, que la caracteriza en su propia esencia evangélica y en su devenir en la historia de sus ochocientos años. Allí, en Asís, junto al sepulcro de nuestro Padre, hemos escenificado una liturgia que nos ha hecho revivir el proceso vivido por Francisco y sus primeros compañeros.
La experiencia personal de Francisco culmina, tras un proceso de varios años de discernimiento, en la revelación del Evangelio como camino de vida. Ya en sus inicios la itinerancia se hace compañera de camino de Francisco, y ya no lo abandonará jamás. Todavía hoy, nosotros, sus hijos y seguidores, continuamos a vueltas con la itinerancia, más aún, ésta siempre nos cortejará, porque es nuestra condición ser peregrinos y caminantes.
Una suave música de violines se eleva desde el silencio, creando la atmósfera que nos transporta hasta el lejano año de 1209. Y así iniciamos con Francisco y sus compañeros el viaje a Roma. Nos acompaña la incertidumbre por lo atrevido de nuestra intención: pedir al Señor Papa que nos permita vivir casi literalmente como dice el Evangelio. ¿Qué impresión causará nuestro aspecto de hombres simples y pobremente vestidos en las majestuosas estancias de la curia papal? ¡Eso si conseguimos siquiera que nos dejen entrar! Pero el convencimiento que tenemos es tal que, si nos echan por una puerta, volveremos a entrar por otra. Y así fue cómo nos recibió el Papa, que, movido por divina inspiración, nos aprobó verbalmente nuestro sencillo y evangélico modo de vida.
¡Con qué alegría desandamos el camino de Roma a Asís, llevando impreso en nuestra mente este primer encuentro con el Señor Papa! La Iglesia, representada en su Cabeza por el Vicario de Cristo, acogió nuestro modo de vida en su seno como una regla válida para encarnar el Evangelio. Vivir en el seno de la Iglesia será para nosotros la garantía de no desviarnos de nuestra Regla, aun en tiempos de dificultad.
La cadencia musical nos devuelve al tiempo presente, y nos disponemos a renovar nuestra profesión: “Yo, hermano fr. …prometo vivir el santo Evangelio de nuestro Señor Jesucristo…”

Fr. Saturnino Vidal Abellán, ofm

19 de junio de 2009

domingo, 14 de junio de 2009

Validez y Actualidad del Carisma Franciscano


Las primeras palabras del Ministro general a la asamblea de los hermanos, después de su reelección, han sido el manifiesto de su propio camino personal en el servicio a la Orden. Fr. José Rodríguez confiesa que tiene necesidad de que los hermanos le estrechemos con los lazos de la oración, la colaboración y la cercanía. Y así lo pide a toda la Orden representada en los casi doscientos hermanos aquí presentes.
La razón por la que Fr. José acepta el servicio de Ministro de toda la fraternidad es –en sus propias palabras- “porque creo firmemente en la validez y actualidad del carisma franciscano”. El carisma franciscano no es moderno –tiene una juventud de ochocientos años-, pero sí es actual. Lo moderno hace referencia a la edad, la actualidad es el certificado de su valía. Y ésta no depende de los solos proyectos franciscanos, que detrás de ellos como motor y guía se encuentra el Espíritu Santo, verdadero Ministro general de esta fraternidad de los Hermanos Menores. Por eso dice Fr. José que se considera a sí mismo no como un líder, sino como un siervo; no como maestro, sino discípulo; no como espectador, sino testigo. Líder se nace, ministro se aprende, y para ello es necesario estar en permanente actitud de hacer camino.
La experiencia atesorada en los años de servicio a la Orden otorga a Fr. José Rodríguez Carballo un privilegiado conocimiento de la realidad actual de la fraternidad mundial, como quizá ningún otro hermano pueda tener en este momento. Por la parte que a nosotros ha tocado, ésta ha sido razón bastante para su reelección. Su hacer camino como ministro y siervo de esta fraternidad, quiere él sea en una triple actitud: de escucha, de cercanía y de gratitud. Escucha orante de la Palabra, en la que hemos de descubrir las señales que marcan el camino para nuestros tiempos. Escucha atenta y cordial de los hermanos, junto a los que hay que hacer el camino en fraternidad, realidad ésta la más frágil, contaminada por las formas de vida que ofrece y propone una sociedad como la actual. Cercanía para acompañar los procesos personales y fraternos, muchas veces dolorosos porque implican cambios radicales en nuestra vida. Gratitud, puesta la mirada en Dios, que nos ha “regalado” los unos a los otros para que cada uno seamos el signo de su donación incondicional y así lo manifestemos al mundo.
Es posible que el Ministro general, en el trazado de su derrotero personal, haya marcado también el camino de la Orden hacia el futuro.

Fr. Saturnino Vidal Abellán, ofm

13 de junio de 2009






viernes, 12 de junio de 2009

A los Ministros de Economía del G8



Por su interés reproduzco la carta que el Capítulo General de los Hermanos Menores han dirigido a los Ministros de Economía del G8:





A los Ministros de la economía del G8
Nosotros, Franciscanos, Frailes Menores (Gobierno de la Orden, Ministros y Custodios), reunidos en Asís para el 187° Capítulo general en este año 2009, VIII centenario de la fundación de nuestra Orden, y procedentes de 110 países del mundo en representación de 15.000 Hermanos que comparten directa y concretamente la suerte de nuestros pueblos, deseamos enviaros a Vosotros, Ministros de economía del G8, el saludo franciscano de “¡paz y bien!” y nuestro fraterno y sentido mensaje.
Somos testigos, en nuestra sociedad, del no suficiente reconocimiento de algunos derechos inalienables de la persona humana a nivel económico, social, cultural, civil y político, entre los cuales se encuentra el derecho a la vida en todas sus etapa; a la libertad en sus múltiples manifestaciones; al trabajo y al estudio; los derechos de la mujer y de los niños; sin olvidar el problema crucial del desempleo y la falta de apoyo a las familias en dificultad.
Constatamos con creciente inquietud cómo la globalización, regida por puras leyes de mercado, trae como consecuencias: la atribución de un valor absoluto a la economía, el desempleo, la disminución y el deterioro de los servicios públicos, la destrucción del ambiente y de la naturaleza, la producción y la venta indiscriminada de las armas, el aumento de las diferencias entre ricos y pobres, la competencia injusta que pone a las naciones pobres en una situación de inferioridad cada vez más evidente, obligando a millones de personas a una emigración desesperada de sus propios territorios.
Para superar la crisis económica, nosotros creemos en el compromiso de transformar nuestro estilo de vida a través de una sobriedad más responsable, el compartir como alternativa a la competencia, el respeto del ambiente y la no violencia activa.
A la luz de lo anteriormente mencionado proponemos que los gobiernos:
* programen una economía que represente un cambio de paradigma, es decir, el paso de un modelo de economía de libre mercado a un modelo de economía de la sostenibilidad, que da el primado a la dimensión social y ambiental sobre aquella estrictamente económica, y que garantice las necesidades fundamentales de todos con la contribución de todos;* favorezcan políticas productivas que eviten producciones contaminantes;* desarrollen políticas energéticas basadas en energías renovables respetando los ecosistemas;* mantengan los compromisos ya solemnemente asumidos de destinar el 0,7% del PIB para el logro de los ocho objetivos de desarrollo del milenio.
Siguiendo las enseñanzas de Francisco de Asís, patrono de la ecología, conocido en todo el mundo como testigo de paz y de fraternidad, solicitamos que se coloque en el centro a la persona humana en todas sus dimensiones, pidiendo que sea promovido ulteriormente:
* el respeto de la dignidad y de la igualdad de la persona humana con el compromiso consiguiente de la construcción del bien común y del destino universal de los bienes;* un renovado esfuerzo hacia un desarrollo sostenible que garantice la realización de las necesidades de las generaciones actuales sin poner en riesgo posibilidades y satisfacciones a las futuras;* un crecimiento económico compatible con el cuidado ambiental y la distribución de beneficios entre todos los países.
Por eso os pedimos que, con solicitud, podáis comprometeros en la tarea de satisfacer de la mejor manera posible las expectativas y las necesidades del hombre de hoy.
Como Frailes Menores os aseguramos todo nuestro apoyo para este camino y os saludamos con las palabras de Francisco de Asís, fundador de nuestra Orden: “¡El Señor os dé su Paz!”.

viernes, 5 de junio de 2009

"Esta es vuestra vocación y misión"


Este día, jueves, 4 de junio de 2009, ha sido un día importante en nuestro Capítulo general, pues era el día señalado para la elección del Ministro de toda la Orden. Ya desde el sábado anterior, con la vigilia de Pentecostés –celebrada desde el caer de la tarde hasta la media noche-, hemos venido preparando este acontecimiento, en lo esencial, con un clima de oración. El día de Pentecostés, junto a la venida del Espíritu, y como no queriendo faltar a la cita; más aún, como un nuevo símbolo de la purificación necesaria para “tener el Espíritu del Señor y su santa operación”, nos ha visitado la hermana agua, en forma de una lluvia suave y persistente, que ha refrescado el ambiente y nos ha hecho gozar de la frescura y la fragancia de la primavera de Asís.
Esta mañana Francisco se ha puesto de nuevo a los pies y en los brazos de la Iglesia, en la persona del Señor Cardenal José Saraiva –enviado de su Santidad el Papa Benedicto XVI- iniciando la jornada con la celebración de la eucaristía, presidida por el Señor Cardenal. “El Señor os dé la paz”. Así ha comenzado sus palabras en la homilía, recordando que era el saludo que Francisco amaba. Y que la razón de iniciar la jornada de esta manera está en “beber del manantial que brota de la Eucaristía, para vivir también el acto formal y oficial de la elección del Ministro colmados de la gracia del Espíritu Santo”. En efecto, nosotros somos conscientes de que nuestro actuar brota de nuestras reflexiones, discernimientos y compromisos, pero tiene como suelo donde hunde sus raíces una actitud de fe y confianza en Dios, “sumo bien, todo bien, el bien total”. El fruto de esta actitud es un amor incondicional a la creación entera, sostenida en el amor de Dios, recreada en el amor de la criatura el hombre. Y eso somos nosotros. “Esta es vuestra vocación, esta es vuestra misión, y éste –incluso- el tema de vuestro Capítulo general” –nos ha recordado el Señor Cardenal.
Reunidos en asamblea todos los hermanos capitulares, en representación de todos los hermanos de todas las entidades de la Orden, habiendo procedido según lo establecido, hemos elegido –mejor reelegido- como Ministro y siervo de toda la Orden, por seis años, a Fr. José Rodríguez Carballo. Sea con él la fuerza del Espíritu para acompañar, como cabeza, la misión de la Orden en nuestro tiempo.
Los hermanos del Convento de La Porciúncula nos han invitado en este señalado día a compartir su mesa, abundante de manjares y rebosante de alegría fraterna. El Ministro general, en unas palabras de agradecimiento a su Santidad en la persona del Señor Cardenal, y a toda la orden representada en los allí presentes, ha recordado que la vocación y misión de la Orden se realizará siempre en la Iglesia y desde la Iglesia. Una vez más, Francisco ha prometido obediencia y reverencia al Señor Papa, y de él ha recibido la misión de llevar al mundo, con alegría y sencillez, la Paz y el Bien.

Fr. Saturnino Vidal Abellán, ofm

4 de junio de 2009

jueves, 4 de junio de 2009

Nuevo Ministro General


Esta mañana ha sido reelegido como Ministro General de la Orden de Hermanos Menores, Fr. José Rodríguez Carballo. Franciscano de la Provincia de Santiago desde 1971, es Licenciado en Sagrada Escritura por el Bíblico de Roma y Teología Bíblica en Jerusalem.
En el año 2003 fue elegido Ministro General, servicio para el que ha sido reelegido en el Capítulo que se está celebrando en Asís.
Dos son los pilares en los que ha centrado su actuación en el gobierno de la Orden: en primer lugar redefinir la presencia de los franciscanos en la Iglesia y en la sociedad, sin perder la identidad, no cabe duda que el franciscano tiene que seguir amando a la Iglesia y amando al pobre, desde la sencillez y la humildad propia de la Orden, estar atentos y cercanos a quienes nos necesiten desde los múltiples rostros de la pobreza de hoy en día.
El otro pilar es el de los estudios en la Orden, ha insistido en la creación de Centros regidos por la Orden donde, el conocimiento de la teología y de la filosofía franciscanas se vuelva a retomar y se cree un pensamiento, una forma de vivir, propia de la Orden, que no tenga que estar recurriendo a elementos ajenos al franciscanismo.
Ambos pilares serán los que el Nuevo Ministro General Franciscano continuará desarrollando, siempre en la atención a los hermanos, visitando a los hermanos extendidos por todo el mundo, a los que con su presencia, como sucesor de San Francisco (es el número 119 en la línea de sucesión de Nuestro Padre), alienta y anima para ser fieles a la vocación a la que han sido llamados.

lunes, 1 de junio de 2009

Sugerentes Posibilidades de Futuro en la OFM



Hemos concluido nuestra primera semana de vida en común en la oración, el trabajo y la recreación. Este primer núcleo de labores ha tenido por centro el informe que el Ministro general, Fr. José Rodríguez Carballo, ha expuesto a la asamblea de capitulares. A lo largo de tres jornadas, Fr. José ha ido presentando su conocimiento del estado actual de la vida en las distintas entidades de la Orden. El parecer común es que ha sido un informe objetivo, realista y sugestivo. El Ministro general, durante los seis años de su servicio, ha visitado personalmente casi todas las Provincias, Custodias y Fundaciones que la Orden tiene en el mundo. Junto a su conocimiento personal, el Ministro se ha servido de los informes de los Visitadores generales, que, en su nombre, han visitado a las entidades para la preparación de sus tiempos fuertes capitulares.
Como consecuencia de este conocimiento, el informe del Ministro está recorrido, de principio a fin, por una cadena de sugerentes posibilidades de futuro, muchas de las cuales han prendido en el espíritu de la asamblea de los hermanos, y, sin lugar a dudas, quedarán reflejadas en las proposiciones finales de este Capítulo general. El trabajo realizado en los distintos grupos lingüísticos ha enriquecido, si cabe, aún más, el ya rico informe del Ministro. Los desafíos que esperan a nuestra Orden a pie de calle tienen mucho que ver con las relaciones interpersonales, es decir, con la calidad de nuestra vida fraterna, con nuestro posicionamiento en el cuerpo de la Iglesia, es decir, con el discernimiento acertado de las fronteras de la evangelización, y con nuestra ubicación en el claustro del universo mundo, es decir, con la apropiación de actitudes y compromisos para el sostenimiento integral de la creación.
No todo lo nuestro es pura reflexión. Esta semana ha tenido también una experiencia del lado de los símbolos. Una de las tardes hemos subido al convento de San Damián –quizá con el deseo de acercarnos a la experiencia de Francisco en su encuentro con Cristo- y hemos celebrado una liturgia. Ceremonia que quería ser expresión de dos actitudes que son piedra angular de todo crecimiento personal y comunitario: el perdón y el agradecimiento. Tras ochocientos años de historia franciscana, ¡cuánto hemos de agradecer y cuánto perdón tenemos que suplicar! Como memoria de tantos años de vida hemos iniciado nuestra “peregrinación” desde las afueras del santuario, “vestidos” de ceniza en nuestras cabezas como reconocimiento humilde de las sombras que han acompañado nuestro caminar histórico. Llegados desde el claustro de la vida al claustro interior, reunidos en torno a la Palabra, acompañados de la presencia de Clara de Asís, hemos hecho una fiesta de acción de gracias porque reconocemos también que los dones no son nuestros, sino del Omnipotente y Altísimo Señor, a quien debemos la alabanza, la gloria y el honor.
Esta liturgia se ha completado con el abrazo de los hermanos que moran en San Damián, con su acogida fraterna y la oferta de su evangélico vaso de agua, que nos ha dispuesto para el regreso a Santa María de los Ángeles.

1 de junio de 2009
Fr. Saturnino Vidal Abellán

sábado, 30 de mayo de 2009

Desde Asís


Desde el día 24 de mayo de este año 2009 nos encontramos en Asís, venidos de todas las partes del mundo, cerca de doscientos frailes, Hermanos Menores, hijos de San Francisco de Asís, que nos hemos reunido para celebrar nuestro Capítulo general, en el que, después de evaluar nuestra vida y misión en todo el orbe, hemos de elegir un nuevo gobierno para nuestra Orden.
Digo encuentro, pues nuestra presencia aquí no tiene otra motivación que aquella que tuvieron los primeros compañeros de Francisco cuando, después de haber sido enviados a predicar entre las gentes de diversos pueblos y regiones, ardían en deseos de volver a encontrarse para poner en común todo aquello que el buen Dios había repartido en bondad a través de sus humildes servidores. Y cuando este encuentro se producía, el tiempo y la vida toda se convertía en una sencilla y alegre alabanza al Creador. ¡Qué gozada este encuentro con tantos hermanos!
Digo venidos, de todas las partes del mundo. Viene quien antes ha sido enviado. Y nosotros hemos sido enviados al cumplimiento de una misión, la de ser anunciadores y portadores de la buena noticia del Evangelio. Más aún, hemos sido hechos misión, porque nuestra vida, expresada en la profesión de nuestra Regla, consiste en vivir el santo Evangelio de nuestro Señor Jesucristo. La profesión de una misma Regla nos convierte en hermanos, el compromiso de vivir el Evangelio nos sitúa entre los menores de este mundo, y ambas cosas a la vez se traducen en una forma de vida que tiene por claustro la hermana madre tierra y por compañeros de camino todas sus criaturas.
Digo venidos para celebrar, evaluar y elegir. Nuestro encuentro es una celebración, una interminable acción de gracias a Dios, que nos ha convocado en este lugar, Santa María de los Ángeles -donde maduró la vocación de Francisco- y que expresamos a lo largo del día en diversos momentos litúrgicos sacros y en la también liturgia de nuestra convivencia y trabajo. Éste, con la luz de aquella, nos va introduciendo, según avanzan los días, en el meollo de nuestro modo de vida actual, para escudriñarlo y discernir si es conforme al Evangelio que prometimos.
Nuestro Capítulo general se celebra, por deseo de nuestro Padre san Francisco, en el tiempo de Pentecostés. Nuestra experiencia nos recuerda también aquel acontecimiento, pues son muchas las lenguas que se hablan entre nosotros y, aún así, el Espíritu nos hace entendernos. Con esta presencia del Espíritu nos disponemos a elegir a un hermano como Ministro general, es decir, como el primero que ha de estar en actitud de disponibilidad y servicio para conducir a la Orden por donde sople el Espíritu, que es nuestro verdadero Ministro.

Asís, 29 de mayo de 2009
Fr. Saturnino Vidal, ofm

sábado, 23 de mayo de 2009

Comienza el Capítulo General OFM


Comienza el Capítulo General, pero ¿que significa tal acontecimiento?.

Para nosotros los franciscanos mucho. Es un tiempo de gracia donde la Orden, representada en los Ministros Provinciales de todo el mundo, analizan la realidad de la Orden, su misión en cualquier parte de la tierra, y sobre todo su comunión con la Iglesia. La Orden nace y tiene su razón de ser en la Iglesia y desde la Iglesia.

Para los franciscanos españoles, tiene un sentido especial, vivimos un tiempo de reflexión en el que nos planteamos cual debe ser nuestro papel en España, cual es el testimonio franciscano que debemos dar, que nos piden los hombres y mujeres y que podemos dar, desde la realidad que vivimos.

Es mucho, por tanto, lo que este Capítulo nos puede dar, vamos a ir reflexionando y confiando en que el Espíritu Santo siga siendo el verdadero Ministro General de la Orden y nos ilumine en el camino que tenemos de llevar a cabo para hacer realidad la "refundación", el volver a hacer de la Orden testimonio de la cercanía de Cristo y de la Iglesia a los hombres y mujeres de hoy.

sábado, 16 de mayo de 2009

Un Viaje Apostólico


Mucho hemos leído esta semana del viaje de Su Santidad Benedicto XVI a Tierra Santa, y más leeremos este fin de semana, sobre todo en las webs católicas, haciendo un balance del mismo. Pero si hay algo que debemos evitar es el hablar de este viaje en categorías de éxito, o metas alcanzadas. Si así se hiciese traicionaríamos la misma razón del viaje.

Su Santidad ha afrontado el viaje como lo que es, el Vicario de Cristo que lleva el mensaje apostólico de fortaleza, de saberse miembros de una Iglesia y amados de Cristo Resucitado a los hermanos cristianos de aquella tierra. Y lo ha hecho desde la fe, sin políticas irritantes y respetando a todos.

Además ha visitado aquellas tierras como un día lo hizo San Francisco, sin el deseo de imponer, únicamente el de llevar el mensaje de Cristo a todos los hombres de buena voluntad. Y que nadie se extrañe si ese mensaje es el de la paz, la reconciliación de los hombres y mujeres de aquella tierra, la caídas de aquellos muros que se levantan para dividirnos, no sólo los muros físicos sino sobre todo los mentales, los del corazón que impiden el perdón.

El Papa ha visitado Tierra Santa y ha llevado el Evangelio, sin una palabra más alta que otra, pero sin callar tampoco las injusticias. Todo con respeto, pero con la certeza, que da la fe, que la Verdad es Cristo.

Por eso, si cabe, se debe destacar más todavía la compañía que ha hecho el Ministro General de la Orden Franciscana al Papa en el Monte Nebo, Nazaret, es la presencia franciscana en la Tierra de Jesús, silenciosa pero siempre presente.

martes, 12 de mayo de 2009

Nueva cortina de humo


Hoy se inicia el Debate del Estado de la Nación, y como suele ser habitual cuando hay un problema que supera al gobierno, se lanza una cortina de humo que distraiga al personal y se pase de puntillas ante la cruda realidad.

A nadie escapa que el administrar la píldora postcoital en las farmacias, para todo el que la pida, incluidos menores, es una auténtica aberración. Estamos hablando de un medicamento con un alto contenido en hormonas que tiene efectos secundarios, y que no va a evitar la proliferación de las enfermedades de transmisión sexual, ni mucho menos los embarazos "no deseados".

Se olvida este gobierno que lo que hace falta es una buena educación a los jóvenes, no sólo educación de como practicar el sexo, sino educación en todos sus parámetros. Mientras que no tengamos esa educación de nada servirá favorecer la práctica discriminada del sexo. Y el ejemplo lo tenemos en la prensa diariamente, padres que abusan de sus hijas, hermanos de sus hermanas. Todo ello fruto de un país donde la educación que se está impartiendo es el "disfruta sin importarte los demás".

Y mientras tanto hay cuatro millones de parados, que no van a tener para píldoras a los cuales el gobierno tiene engañados con unas supuestas políticas sociales, y sin crear nuevos puestos de trabajo. Pero para las ministras España es más feliz porque los jóvenes tendrán otra pastillita para tomar.

jueves, 7 de mayo de 2009

El Papa en Tierra Santa



Mucho se va a hablar en los próximos días de la visita de Su Santidad Benedicto XVI a los Santos Lugares, que si siguiendo los pasos de Cristo, que si en busca de la fe. Y todo ello es cierto, como también lo es que su verdadera visita es a los cristianos que tratan de vivir allí su fe.
La situación en la que se encuentran los cristianos árabes no es nada envidiable, son perseguidos a causa de su fe tanto por musulmanes como por judíos, se les impide desarrollar su vida cultual llenándoles la entrada a las Iglesias de camiones de basura, y lo que es peor muchos tienen que abandonar sus casas, sus tierras, por la presión, que en muchos casos lleva a la muerte, a la que se ven sometidos. No debemos olvidar que el ser expulsado de su tierra es una de las mayores tragedias con las que se encuentra un árabe, para quién la tierra es parte ontológica de ellos, no es un pedazo de tierra es la vida, el ser, lo que da sentido a todo lo demás.
Los países occidentales callan ante tanto agravio, quizás por que es mas recurrente hablar de sus “alianzas de civilizaciones” que como juegos florales es simpático, pero como reflejo de la vida diaria es muy lejana a la realidad.
Los hermanos franciscanos de la Custodia están llevando a cabo desde hace varios años el apoyo a los cristianos árabes no únicamente en el campo espiritual, sino material, haciendo posible el comer diario y dando casa a quienes son expulsados de sus hogares.
La visita de Benedicto XVI será sin lugar a dudas un aliento de esperanza a aquellos hermanos nuestros para los que vivir la fe les supone no sólo el rechazo social, sino incluso les puede llegar a costar la misma vida.

jueves, 30 de abril de 2009

Crisis o Tiempo de Renovación






Querid@s Herman@s: ¡El Señor resucitado os dé la paz!
Estamos en tiempo de crisis, aunque quizá sea mejor decir que nadamos en la crisis que nos ha tocado vivir. Crisis en la economía, crisis en la política, crisis religiosa, crisis de identidad, crisis en la familia, crisis de valores, crisis globalizada. Así se manifiesta la crisis de nuestro tiempo.
Dice Jesús que ha venido a poner el mundo en crisis. La crisis provoca desmantelamiento de estructuras, vacío de poderes, oscurecimiento de identidades. La crisis es, por consiguiente, una oportunidad para crear estructuras nuevas, descubrir servicios nuevos, afrontar nuevos retos, buscar nuevas identificaciones, resituar de nuevo los valores… Es decir, la crisis lleva en sí misma la propuesta de la novedad. ¿No será ahora la ocasión de una nueva oferta de los carismas de la vida religiosa a nuestra sociedad? ¿No estará el Señor invitándonos a hacer un ofrecimiento abierto, valiente, arriesgado, de nuestras vidas? ¿No abre la Resurrección un camino nuevo para la humanidad?
La novedad tiene aroma de primavera, vigor de juventud, pasión de primer amor. “No tengáis miedo”, vamos a escuchar reiteradamente en la liturgia del tiempo pascual. A lo largo de este tiempo la presencia resucitada del Señor nos invita a adentrarnos un poco más en el camino del discipulado. La presencia del Señor nos dona la paz, su paz, no la que se construye sobre el miedo, sino la que se sustenta en el servicio. La presencia del Señor resucitado llena de alegría la vida, en un abrazo de esperanza que la pone en camino hacia su plenitud. La Resurrección convoca a la misión, a la siembra ilusionante que germinará como futura cosecha. La paz, la alegría y la misión que son, a un tiempo, actitudes, objetivos y esperanzas del discípulo de Jesús.
Fr. Saturnino Vidal Abellán, ofm
Ministro Provincial-Provincia Franciscana de Cartagena