jueves, 27 de octubre de 2011

"Peregrinos de la Paz". XXV Aniversario Espíritu de Asís


Con motivo de la celebración del XXV aniversario del “Espíritu de Asís” que Su Santidad Benedicto XVI celebra hoy 27 de octubre en la ciudad italiana recordando el primer gran encuentro realizado por el Beato Juan Pablo II, los Ministros Generales de las Ordenes Franciscanas han publicado una carta, recordando e invitando a la celebración de tan magno acontecimiento.
Lo primero que se nos recuerda es que nos encontramos ante un acontecimiento que va más allá del franciscano, es sobre todo una celebración de la Iglesia Universal que elige la ciudad de Asís “por el especial significado del hombre santo que se venera en este lugar (San Francisco) conocido y reverenciado por tantos en todo el mundo como un símbolo de paz, reconciliación y hermandad”, con estas palabras en su discurso inicial del encuentro Juan Pablo II inauguraba el encuentro. Y el día 1 de enero de este año Benedicto XVI anunciaba su deseo de “renovar solemnemente el compromiso de los creyentes de todas las religiones a vivir su propia fe religiosa como un servicio a la causa de la paz”.
En definitiva la Iglesia entera debe recordar su gran misión de ser portadora de la paz en un mundo tan disperso y lleno de conflictos como es el actual en el que nos encontramos, y nosotros como franciscanos nos sentimos en la obligación de empeñar nuestras vidas en esta tarea de la paz. No por nada el tema de la celebración de este año es Peregrinos de la paz, nos encontramos en el camino y no podemos permanecer quietos debemos caminar y en nuestro avanzar ser constructores de paz como lo fue nuestro Padre San Francisco.
Pero no debemos olvidar que para ser caminantes como San Francisco, él pasó gran parte de su vida en comunión con Dios y dicha comunión sólo se alcanza desde la oración. La celebración del “Espíritu de Asís” debe recordarnos en primer lugar que el elemento esencial en la búsqueda de la verdad es la oración insistente.
Únicamente aquel que ora es capaz de darse cuenta que quién busca la paz no se puede conformar con generalidades sino que debe esforzarse en encontrar formas concretas y efectivas para construir la paz. Por ello, la carta de los Ministros generales nos recuerda que lo primero que se nos pide a los franciscanos es ser testigos de esa paz, para lo cual debemos buscar que nuestras comunidades sean lugares de paz donde se trabaje en limar las posibles asperezas que surjan para eliminar los obstáculos y alcanzar un buen grado de armonía.
Desde el trabajo serio en nuestras comunidades debemos afrontar los problemas de nuestro tiempo, la crisis económica ha dejado al aire una gran crisis de valores que ha hecho que problema sea mucho más grave que una mera situación económica, debemos más que nunca leer los signos de los tiempos y desde el franciscanismo, en todas sus ramas, buscar el lugar para que nuestra presencia sea significativa en nuestra sociedad, favoreciendo el encuentro con Dios y con los hombres y entre los hombres y mujeres de nuestro tiempo entre sí, de tal manera que nos esforcemos en alcanzar espacios de diálogo que eviten el relativismo y ayuden al encuentro del hombre con Dios.
En definitiva los Ministros nos invitan a celebrar este importante acontecimiento, continuando con las celebraciones que se han venido celebrando a lo largo de estos veinticinco años dándole si cabe una mayor importancia y para aquellos que puedan se hagan presentes el 27 de octubre en Asís. Para las celebraciones locales se ha creado una página web (http://spiritodiassisi.worpress.com) con  materiales que se pueden utilizar en la celebración, están en varios idiomas y son una invitación para unirse en la oración y promover nuestra presencia franciscana en medio de la sociedad. “Que nosotros, como Francisco y Clara, seamos consumidos por el amor a Jesús, por la humanidad y por nuestra hermana, La Madre Tierra”.

viernes, 21 de octubre de 2011

¿Donde esta la Iglesia en el proceso de paz?


Vaya semana que llevamos con ETA y sus acólitos, primero con una reunión de personas ajenas a la realidad española que vienen a hacerse una foto y a decir que buena es la paz, como si eso no lo supiésemos sin necesidad que nos lo digan. Y ayer segundo paso de esta obra de teatro de tercera a la que nos invitan a la sociedad española, con la declaración de los asesinos de ETA, que nadie se olvide que son delincuentes, que no son luchadores por la libertad.
Pero en todo este teatro se han olvidado de invitar a la Iglesia que hasta ahora siempre aparecía en todas estas fotos y declaraciones, quizás porque algo ha cambiado en la Iglesia vasca. Indudablemente que la Iglesia de las tres provincias de vascongadas y Navarra ha cambiado, lejos quedan las medias declaraciones y el considerar como  víctimas a todos, se sigue trabajando por la paz pero algo más al lado del que sufre que de aquel que causa el sufrimiento, pero todavía falta un largo camino.
No cabe duda que esta posición de claridad, no es tan nítida, y esa “mediocridad” es la que hace que en este proceso de paz se hayan olvidado de invitar a la Iglesia, si como institución no representa nada ni a nadie no cabe duda que no puede aparecer como elemento representativo para la búsqueda de la solución de paz y convivencia tranquila y armoniosa entre el pueblo y en la sociedad rota por el terror y en la que mucha gente ha tenido que abandonar sus casas o llorar a sus muertos.
La Iglesia se equivocó al estar al lado de ETA como solución para buscar la democracia, pero mayor fue su error cuando no supo aprovechar su posición de privilegio para haber zanjado el problema del terrorismo cuando ella podía y tenía la fuerza y autoridad moral para conseguirlo. El pueblo vasco tiene entre sus grandes cosas que es un pueblo que obedece y que siente su pertenencia a la Iglesia, al menos así era, pero muchos años de presencia eclesial equivocada han conducido  a la situación actual en el que la Iglesia no representa nada y ha sido dejada a un lado en todo este proceso de reconciliación.
Esperemos, que este tiempo de cambio sea un momento de renacimiento para la sociedad e Iglesia vasca y española y de un modo especial que estos cambios afecten a la Iglesia vasca para bien y le hagan recuperar el sitio que siempre tuvo en medio de aquella sociedad.

lunes, 8 de agosto de 2011

Llega la Jornada Mundial de la Juventud

Se acerca la JMJ y hay algunas cosas que me gustaría reflexionar. La primera se está olvidando que va a haber una movilización de más de medio millón de jóvenes cristianos, y sin embargo se está criticando que es un atentado contra la humildad cristiana. A los que dicen esto les preguntaría si se han pasado por nuestras universidades y han visto a los jóvenes de hoy en día, ni cayéndoles un meteorito en la cabeza son capaces de reaccionar, vivimos una sociedad casi sin futuro laboral, con los valores por los suelos y nadie se moviliza. Viene el Papa hay una movilización masiva y algunos “cristianos” de nombre sólo saben criticar este movimiento.


Sé que sería una pena que la JMJ quedase únicamente en los cuatro días de encuentro con el Papa pero ninguna JMJ se ha quedado en eso, ha sido siempre un aldabonazo en las conciencias jóvenes para vivir la fe en comunidad, sintiéndose parte de la Iglesia y obligados a hacerla suya y sentirla. Acaso se nos olvida que los jóvenes ven a la Iglesia lejana, pues dejémosles que se acerquen y la sientan como su casa.

Otra cuestión a tener en cuenta estos días es la de los “indignados”, y ahora escriben con temor que pueden ser motivo de conflicto con los jóvenes de la JMJ, que deben ser respetuosos y vivir la sana libertad religiosa. A lo mejor debían haberlo pensado antes de calentar el ambiento en contra de lo que es la JMJ, pero una vez que hemos llegado a este punto será un motivo de gozo observar como los jóvenes cristianos saben hacer frente desde el sosiego y la libertad a tonto “indignado” manipulado por el gobierno, o ¿a nadie se le ocurre ver que han estado callados durante meses y o casualidad aparecen justo una semana antes de la llegada del Papa?.

Sin embargo estos indignados no dicen nada de los veinte millones que por no hacer nada y tener la boca callada y evitar que los obreros y parados salgan a la calle el gobierno ha dado a los sindicalistas. Pero que vengan medio millón de personas a una ciudad que sea el centro del mundo con lo que eso supone de ingresos y de trabajo eso sí se critica.

Hace tiempo dije que los “indignados” deberíamos ser los cristianos que ahora levantamos nuestra voz a favor de una sociedad de personas, con valores renovados donde prime la relación de las personas por encima del individualismo, el compartir más que el egoísmo, vamos lo que Jesús y el mensaje de la Iglesia nos enseña.

He decidido que voy a ir a la JMJ, creo que es un momento excepcional el que se va a vivir y los católicos (que nadie olvide que católico significa universalidad, no es exclusión sino unión) debemos estar allí mostrando que vivimos nuestra fe y nos sentimos orgullosos de estar en esta Iglesia que es la de Cristo, tomemos la calle y sin temor y con mucho orgullo proclamemos la fe que se vive en el día a día, en la atención al hermano que lo necesita y en el amor a la Iglesia nuestra Casa común donde se vive la misericordia del Padre.

sábado, 2 de julio de 2011

Homenaje a un buen Profesor



Estas letras quieren ser un homenaje al profesor y hermano franciscano “culpable” de que yo me encontrará con el Derecho Canónico y decidiera estudiarlo.

El pasado viernes el Señor lo llamó junto a él, y el domingo lo despediremos con una eucaristía que él siempre celebró conocedor de la grandeza de Dios Padre y los dones que le había entregado en su vida.

El P. Pedro, siempre decía que estudió derecho canónico de rebote, el iba para otros lares, pero la necesidad de la Provincia le llevaron o le mandaron, recién ordenado a Roma al Antonianum a estudiar la licenciatura, allí fue compañero de grandes profesores de Derecho canónico franciscanos como el P. Antonio García, que siempre lo recordaba como una mente privilegiada para esta ciencia, pero él no quiso seguir en Roma y decidió volver a la Provincia a cumplir aquello para lo que se la había mandado que no era otra cosa que enseñar derecho a todos los frailes de la Provincia y de otras vecinas como las de Valencia, Castilla, no en vano ha sido profesor de esta materia desde los 27 años hasta los 83, porque este año en el que estamos se despedía del Instituto Teológico de Murcia OFM impartiendo la materia de Derecho Fundamental.

Junto con la docencia del derecho, el P. Pedro llevó a cabo la práctica del mismo siendo juez diocesano durante casi 30 años en el Tribunal diocesano de Cartagena, mimaba las sentencias y siempre desde la imperiosa búsqueda de la verdad aplicaba la legislación conocedor de que la salvación de las almas es la ley suprema de la Iglesia, no cabe duda que la impronta franciscana estaba presente.

Unido al derecho su gran desvelo fue la vida religiosa femenina para la cual no dudó en publicar libros, en dar cursos, fomentar la presencia misionera de estas nuevas congregaciones en aquellos países donde la Provincia franciscana de Cartagena ya estaba presente. Ayudó en la elaboración de la legislación particular de muchas congregaciones y en la vida contemplativa fomentando y animando a la creación de las Federaciones como símbolo de colaboración en la formación y el cuidado del carisma.
En definitiva una vida entregada a Cristo en la vocación franciscana y el derecho canónico, sirviendo y ayudando allí donde se le pidió.
Descanse en paz un buen profesor y sobre todo hermano franciscano.

domingo, 19 de junio de 2011

La Iglesia en Lorca

Ayer regresé a Lorca tras el terremoto, hace ya más de un mes del mismo, y por mucho que desde los medios de comunicación se insista nada vuelve a la normalidad y posiblemente la normalidad nunca vuelva, o al menos va a tardar mucho en llegar.

Visité a las hermanas clarisas, y pude comprobar el gran destrozo que ha hecho el terremoto en el monasterio, la Iglesia en la que tantas veces he celebrado ya no existe, se ha convertido en un montón de escombros, y al pasear por el monasterio lleno de cascotes y rajas por las paredes, los marcos de las puertas desencajados es fácil comprender las lágrimas de la madre al contar lo que están viviendo, sin embargo la fe, la ayuda de la buena gente de Lorca no les ha faltado para tratar de rehacer su vida y se sienten muy agradecidas a la comunidad de regantes que son quienes con sus iniciativas van a ayudarlas a levantar de nuevo el monasterio.

También me encontré con algunos amigos, matrimonios que colaboran en las tareas pastorales del Santuario Franciscano de la Virgen de las Huertas, son los que nos hablan de la dificultad de que vuelva la normalidad a la ciudad, mucha gente ha salido de la ciudad han abierto sus comercios en la ciudad vecina de Águilas, lo cual quiere decir que no volverán a Lorca, y cuando ellos salen a tomar algo un sábado por la noche regresan a la casa porque la gente ha olvidado lo que significa divertirse. No, no hay normalidad.

Pero si visitas a las Madres Mercedarias el alma acaba de venirse a los pies, un colegio recién rehabilitado ahora no lo pueden usar, dan las clases en otro colegio del pueblo, y se encuentran sin ayudas ni eclesiales ni estatales para rehabilitarlo, sólo la ayuda de los padres, y eso es muy duro.

Y estas tres situaciones me llevan a una reflexión sobre el papel de la Iglesia en Lorca, si en un primer momento aparecieron como los garantes de la tarea de rehabilitación de los lugares de fe y enseñanza católica, ahora se va viendo que son las iniciativas privadas las que están ayudando a la vida consagrada en Lorca. Iniciativas que promovieron los seglares y que el Ayuntamiento de Lorca vio como la mejor y posiblemente única salida. Al menos está situación de desamparo es lo que ha pasado con dos lugares emblemáticos de la Ciudad de Lorca como es el monasterio de las clarisas y el Santuario de la Patrona, y a la espera se encuentran las Madres Mercedarias de una ayuda que les posibilite poder retomar las clases en el colegio en el próximo curso.

Debería llevar a una reflexión del “x tantos” para destinar una parte importante de la recaudación a ayudar a la Iglesia de Lorca, recordando que Iglesia son, no sólo las parroquias, sino también la vida contemplativa y las vida religiosa que atiende los santuarios como la dedicada a la enseñanza. Hasta el momento estas instituciones eclesiales sólo han recibido ayuda de otras instituciones de vida consagrada que han abierto cuentas bancarias para poder ayudarles en la reconstrucción de sus vidas, pero sobre todo para que continúen con su inmensa tarea de anunciar el Evangelio en Lorca desde la atención a los seglares, la oración contemplativa y la enseñanza.

miércoles, 18 de mayo de 2011

La Iglesia ante la Legislación Civil de Familia en España



Me permito presentaros una nueva publicación del Instituto Teológico de Murcia OFM y de la editorial Espigas.
La razón de ser de esta publicación viene suscitada por un doble motivo: la situación de la familia cristiana en España ante las nuevas leyes civiles que han provocado que se desvirtúe el sentido y la presencia social de la familia como institución generadora de vida y constructora de la sociedad; y en segundo lugar ante la necesidad eclesial de generar un derecho de familia que refuerce la vivencia de fe y la presencia social de los cristianos y sus comportamientos y relaciones desde la familia y la Iglesia en medio del mundo.
Fruto de esta situación es necesario un ordenamiento que tenga a la familia como institución en sí misma, capaz de recibir derechos y de realizar deberes en un doble frente: ante la Iglesia, al ser miembro activo en la tarea evangelizadora de la misma, y ante la sociedad, por ser institución necesaria para su desarrollo y el de sus miembros.
El libro presenta un estudio de las leyes civiles que en los últimos años se han promulgado en España y en las que no se ha tenido en cuenta la familia formada inicialmente por un hombre y una mujer, capaces de crear vida y de dar sentido a la sociedad. Pero a la vez presenta unas repuestas que desde la misma Iglesia se han de dar en los campos de la educación, la integración de todos los miembros de la familia y sobre todo la vivencia cristiana de los sacramentos.
Se trata de reforzar por medio de contenidos jurídicos-pastorales una mayor coherencia de vida y de testimonio de las familias y sus miembros en la sociedad, adquiriendo una mayor plenitud en la recepción de los sacramentos, y alcanzar un mayor compromiso cristiano por parte de la familia.
En definitiva es una obra que no se queda anclada únicamente en el campo del derecho canónico sino que retoma la necesidad de trabajar conjuntamente los campos del derecho, la moral y la pastoral.
Del autor deciros que es buena gente y que lo veo todas las mañanas al mirarme al espejo, es mi primer libro y os invito a disfrutarlo porque no es una obra pensada únicamente para especialistas (si bien la amplia bibliografía así podría parecerlo) sino que es una invitación a todos a repensar la familia cristiana ante la legislación civil.

sábado, 7 de mayo de 2011

Profesores de Religión



Escribo este post en respuesta a ciertos artículos que se escriben a raíz de la sentencia favorable a la profesora de religión que no se le renovó en su puesto de profesora de religión pienso que se equivocan en el fondo de su razonamiento a la hora de defender la denuncia de los Acuerdos Iglesia Estado y pensar que la útima responsable es la Iglesia.
Alguno se sorprende que la sentencia señale que el último responsable sea la Administración, por supuesto es así, es ella la que contrata y la gran pelea de los sindicatos y profesores de religión es que así sea. Son muchos años los que llevan peleando los profesores de religión para que se les reconozca administrativamente su labor de profesores para poder gozar de los beneficios que tienen los demás profesores. Y la gran lucha que han realizado es para que sea la administración quien les contrate.
En segundo lugar presenta la diócesis a los "idóneos" para desempeñar el oficio de profesores de religión pero la baremación de los currículum de dichos profesores la hace la administración con el consenso de los sindicatos el problema es que ni unos ni otros saben baremar un profesor de religión pues dan más puntuación al que tiene una licencia en biología y un máster de contenido religioso o simplemente antropológico que a quien tiene una licencia de teología, y no hablo de memoria sino que me remito a la última baremación realizada en el mes de abril. Ellos deciden que profesores impartirán las clases no el Vicario de enseñanza de las diócesis;
En tercer lugar los acuerdos Iglesia Estado son acuerdos entre dos Estados no la firma realizada en un café por tanto no se pueden denunciar tan a la ligera, porque en esos acuerdos no sólo se encuentra el derecho a presentar profesores sino también la obligación del Estado español en conformidad con la Constitución en su art. 27 a defender el derecho de los padres a educar a sus hijos conforme su creencia e ideología, la posibilidad de elegir el centro donde quieren que sus hijos estudien, sin olvidar que el Estado tiene la obligación de cuidar que existan centros que con tal fin colaboren con la enseñanza pública por medio de conciertos. Si bien una de las grandes trabas que sigue imponiendo la administración es la de tratar equitativamente y en el mismo nivel al profesorado, no solo de religión, de los centros concertados que a los de la enseñanza pública.
Se necesita una profesionalización del profesorado de religión, y en ello debe entrar tanto la equiparación con el resto del profesorado como la necesidad de obligar al profesorado a prepararse seriamente para impartir una materia al igual que se le exige al de matemáticas o inglés.
Creo que el problema del profesorado de religión va más allá que una mera denuncia de los Acuerdos Iglesia-Estado.

martes, 3 de mayo de 2011

Testimonio de Fe. Padre las Casas-Azua


Testimonio de un lomero en Padre las Casas República Dominicana construyendo un puente para poder vivir. Gracias a las Hermanas de Cristo Crucificado y en especial y a la Hermana Emi

sábado, 30 de abril de 2011

Recuerdo de un hombre de Dios



Me resistía a escribir acerca de la beatificación del Papa Juan Pablo II, porque de verdad que se está escribiendo de todo y por todo y unas letras más no aportarían mucho. Sin embargo, unas palabras de una amiga que recordaba el viaje de Juan Pablo II a España en el año 1982, me ha animado a hacerlo. Yo pude disfrutar de la Eucaristía que celebró en Valencia con dos amigos que allí nos plantamos, jóvenes todavía con la idea de ser franciscanos bastante lejano de nosotros, si bien dos al final somos franciscanos y ahora compartimos comunidad. Pero algo nos movió a marchar de Albacete a la ciudad del Turia.
La verdad es que no era sólo ver al Papa, que apenas si lo intuimos en el papamóvil y al final de la misa marchó en helicóptero, pero debía haber algo más en todo aquello. Y no cabe duda que era la fe y el deseo de responder a la convocatoria que nos hacía el Papa hasta ese momento lejano a nosotros pero que se acercaba a nuestros hogares, alguien importante venía a visitarnos y a hablarnos de Cristo, de su Iglesia de la respuesta que se nos exigía sin temor y que debíamos dar.
Quien me iba a decir que con los años me encontraría en Roma en su muerte y en la cola de 12 horas que tuvimos que hacer para darle el último adiós pude hablar con todo tipo de personas que concluían que éste era su Papa, el Papa cercano, que no habían conocido a otro, que les visitó en sus parroquias cuando eran niños y se fotografió con ellos, y que les hablaba como un padre diciéndoles cosas que a lo mejor no les gustaban pero que eran necesarias para vivir la fe, y se las decía con cariño, con la contundencia que da creer lo que se dice porque se vive.
En definitiva fue un hombre que supo mostrar sin miedo la necesidad de ser fiel a la Iglesia y que a ella supo atraer a todos, mostrando la importancia de la oración y del encuentro con Dios como hizo en el encuentro interreligioso en Asís, y que no tuvo que ser tan malo cuando su sucesor PP. Benedicto XVI lo ha recuperado, a fin de cuentas como san Francisco, también él sabía que podiamos ver el rostro de Cristo en todas las criaturas y decirles que Dios Padre misericordioso estaba con ellos.

jueves, 14 de abril de 2011

¿Puede Dios ser democrático?



Ayer a través del blog de un amigo, leía un artículo del periódico “El País” diario independiente de la mañana (tiene gracia lo de independiente) en el que se preguntaba el articulista si Dios era democrático.

Por supuesto en la segunda línea ya nos daba la conclusión a la que quería llegar , Dios no es democrático. Y la verdad es que después de leerlo, tengo que darle la razón y lo digo por lo que sigue:

Si ser democrático es engañar a tu País negando que existe una crisis internacional, y sin poner los medios oportunos llevas a mas de cinco millones de ciudadanos al paro y en muchos casos a la pobre más absoluta, por supuesto que Dios no es democrático.

Si ser democrático es sacar a tu País de una guerra para meterlo en otras dos, Afganistán, donde están muriendo soldados españoles en ataques a helicópteros y acuartelamientos, y a la recién estrenada guerra de Libia, por supuesto Dios no es democrático.

Si ser democrático es rendir tu País a una banda de asesinos con más de 1000 crímenes a sus espaldas (no sólo muertos sino también extorsionados, familias rotas) negociando con ellos olvidando el dolor de las familias a las que se les ha arrebatado un ser querido que simplemente cumplía con su deber, por supuesto Dios no es democrático.

Si ser democrático es pensar que se puede manipular la educación por encima de la obligación gravísima que tienen los padres de educar a los hijos en valores integrales de las personas, por supuesto que Dios no es democrático.

Dios no puede ser democrático, porque Dios es fiel a su pueblo, a pesar del continuo abandono que le hacemos, Dios es capaz de morir por nosotros en la cruz, no por el mero hecho de sufrir sino para darnos vida, porque Dios es Amor y en su Resurrección nos muestra su gran misericordia, con mayúsculas no el amor de algún demócrata que lo confunde con la satisfacción de los instintos. Dios nos permite la posibilidad de amarlo o dejarlo, y sin embargo el siempre se encuentra a nuestro lado, eso Si es ser democrático, esa es la auténtica libertad.

sábado, 19 de marzo de 2011

Sentencia sobre los Crucifijos en las aulas


“El crucifijo simboliza los principios y valores que fundan la democracia y la civilización occidental y por ello justifica su presencia en las aulas”. Con estas palabras la Corte Europea de los Derechos humanos, refrendaba el derecho a que en la aulas de las escuelas públicas italianas permanezcan los crucifijos, ya que no atentan a la libertad de pensamiento ni las ideas filosóficas de las personas.
No cabe duda que no es una sentencia a favor de la fe católica, nadie se equivoque, ni tampoco es una sentencia que se deba aplicar en todos los países de la Unión Europea, si bien si se recomienda su aplicación aunque se deja a la decisión última de los gobiernos nacionales la aplicación de la sentencia, aunque exista la recomendación seria de aplicar lo decidido por la Corte.
De todos es conocida la situación que vivimos en España y a nadie le va a extrañar que se intente no hacer caso a esta sentencia para seguir retirando los crucifijos de las aulas, sin embargo está sentencia, que por su carácter es firme y sin posibilidad de recurrirse, da pie a las asociaciones de padres cristianos a defender ante las instancias judiciales el mantener los crucifijos en las aulas.
Ello nos lleva a insistir nuevamente en dos elementos claves para los padres católicos, la primera la necesidad del asociacionismo de los padres que les hará tener más fuerza ante las instituciones gubernativas. Y en segundo lugar el salvar los complejos que estamos demostrando los católicos en España de callar ante el continuo avasallamiento que sufrimos en la libertad religiosa. Debemos recordar que la Libertad religiosa es igual para todos y si los grupos minoritarios tienen derecho a expresar su fe de la misma forma lo tiene la Iglesia católica a expresar la suya en el ámbito público.
Los hechos que estamos viviendo en diversas universidades españolas, en las escuelas públicas nos deben mover a defender la necesidad de manifestar nuestros derechos a vivir la fe. La sociedad católica debe empezar a manifestar, con paz, respeto, pero con decisión y sin complejos su presencia en medio de los ambientes donde se forman y educan a las próximas generaciones.
La Sentencia nos viene a recordar que uno de los elementos más trágicos que vive nuestra sociedad en la crisis actual es la falta de valores y principios, por ello retomar y defender los símbolos que nos recuerdan los valores que unieron a Europa es no sólo una necesidad sino sobre todo una obligación.
“La Corte subraya que un crucifijo puesto sobre una pared es un símbolo esencialmente pasivo, cuya influencia sobre los alumnos no se puede equiparar a un discurso didáctico o a la participación en una actividad religiosa”. Por tanto, si que no obliga a nadie y sí nos recuerda los orígenes culturales y religiosos europeos, que nadie trate de limitar la libertad de los demás imponiendo la suya propia.
En definitiva esta sentencia no es una defensa a la fe católica, sino expresión de la libertad religiosa que se debe dar en Europa frente al laicismo que pretende retirar la religión, la vivencia de la fe de los espacios públicos. Si queda claro que a nadie se le debe imponer algo en que creer, que tampoco se obligue al modo de vivir y educar en los valores y principios origen de nuestra democracia europea.

miércoles, 2 de marzo de 2011

XXIV JORNADAS DE TEOLOGÍA: FE Y RAZÓN


Comenzamos la próxima semana las XXIV Jornadas de Teología, inspirándonos en las palabras de Su Santidad Benedicto XVI: “La fe y la razón no deben separarse ni contraponerse, sino que deben estar siempre unidas. Como escribió san Agustín tras su conversión, fe y razón son “las fuerzas que nos llevan a conocer”. La armonía entre fe y razón significa sobre todo que Dios no está lejos: no está lejos de nuestra razón, de nuestra vida; está cerca de todo ser humano, cerca de nuestro corazón y de nuestra razón, si realmente nos ponemos en camino”.
Desde esta invitación a ponernos en camino para mantener viva y actual la relación entre la fe y la razón, entre el pensamiento cristiano y el secular, tratando de recuperar para la teología su lugar entre las ciencias del saber, el Instituto Teológico de Murcia OFM organiza estas Jornadas de Teología con el título Fe y Razón los días 7 al 11 de marzo.
Los ponentes serán el profesor Martín Gelabert de la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia que hablará de la Palabra de Dios y la palabra de hombre; D. Melchor Sánchez de Toca y Alameda, Subsecretario del Pontificio Consejo para la Cultura de Roma que nos hablará de la teología como mediación entre la fe y la cultura y cuáles son los principales retos y provocaciones de la cultura de hoy a la teología; D. Santiago del Cura Elena, profesor de la Facultad de Teología del Norte de España con sede en Burgos que hablará de la cuestión de Dios en el diálogo entre fe y razón; D. Paul Janz, Director del Departamento de Religión del King’s College de Londres, que hablará de la Trascendencia y las tentaciones del intelecto: algunas reflexiones sobre la integridad de la razón en la teología sistemática y práctica; terminará el ciclo de conferencias con el profesor Miguel García Baró de la Universidad Pontificia de Comillas en Madrid que hablará de los símbolos fehacientes de Dios en nuestra cultura.
En definitiva una buena oportunidad para que el sureste universitario español aproveche la ocasión en la búsqueda de cauces de diálogo de la teología con la cultura actual y aliente la presencia de realidades que lleven a no contraponer la fe y la razón.
Todas las conferencias se celebrarán en el Salón de Actos del Instituto Teológico de Murcia OFM a las 7 de la tarde.

lunes, 7 de febrero de 2011

Santo Sepulcro y Belén


Ya he regresado a España, sin embargo no quería dejar pasar la ocasión de compartir los dos grandes momentos de esta peregrinación que he tenido la suerte de vivir por los Santos Lugares.
La visita al Santo Sepulcro supuso un gran momento de interiorización de los momentos importantes de nuestra fe. Poder orar ante el lugar donde fue depositado el cuerpo de Nuestro Señor es algo tan entrañable que me cuesta pensar que ningún corazón se pueda quedar frió ante semejante situación. Tuve la gran fortuna de poder estar en dos momentos, uno quizás más rápido cuando todo el grupo visitó el lugar y otro al acabar el Viacrucis, como franciscano pude disponer de algunos minutos más. Visitar dentro de la misma basílica el Calvario y también orar ante el lugar donde fue crucificado Cristo no cabe duda que hacen de esta peregrinación un momento de plenitud.
Pero estos dos grandes acontecimientos los quiero unir con el rezo del Viacrucis, creo que en Jerusalén no ha caído tanta agua desde el día del diluvio, sin embargo los franciscanos con los peregrinos que estaban dispuestos recorrimos el camino de la Vía Dolorosa hasta el Santo Sepulcro, y bajo la lluvia siempre recordaré la sonrisa de satisfacción de una buena mujer que con sus dos bastones y un chubasquero se sentía feliz de poder realizar este ejercicio. Esta es la fe del pueblo que se siente acompañada por Dios y siente su fuerza y amor para superar las dificultades.
Pero como no hay muerte sin nacimiento el poder venerar el lugar donde nació Jesús no tiene tampoco desperdicio, si bien el templo da la sensación de dejadez, lo cuidan los cristianos ortodoxos y deja mucho que desear ese cuidado, pero como lo importante no es el adorno sino el contenido el lugar de Belén y el Campo de los Pastores donde presidí la Eucaristía de ese día no hace sino agrandar el hecho de proclamar todos los días del año el Nacimiento de Jesús, pero sobre todo el reconocer como los pastores que ahora nos corresponde anunciar el nacimiento del Señor desde la sencillez y la humildad de sabernos hijos de Dios a los que el Ángel nos anuncia el nacimiento.
No cabe duda que han sido unos días llenos de intensidad en la vida de la fe, llegue con una forma de pensar sobre los Santos lugares que me han cambiado a lo largo de esta peregrinación, y desde luego que desde hoy la lectura del Evangelio no podrá ser igual, un conjunto de vivencias se harán presentes recordando el camino de fe recorrido estos días.

martes, 1 de febrero de 2011

Primer día en Jerusalén


Hoy es el primer día que hemos visitado Jerusalén. Y desde luego la sensación de la visita ha suscitado sentimientos bien distintos. Por un lado sí se mira desde los edificios no cabe duda que uno piensa que esto no es otra cosa que turismo de santuarios, visitas iglesias construidas en los años 50, muy lejanas a los verdaderos lugares por donde camino Cristo.
Sin embargo, cuando uno se para se da cuenta que lo importante no está en los edificios sino en que esta es la tierra de Jesús, por ella él caminó y predicó, en ella lloró y murió.
Cuando celebras la Eucaristía en la Iglesia del Dominus flevit comprendes porque Jesús lloró al contemplar Jerusalén y vaticinar los sufrimientos de esa ciudad. Desde allí se contempla de un vistazo toda la ciudad y con alguien que cada vez que subía a Jerusalén se agotaba por el sufrimiento que llevaba el continuo enfrentamiento con el poder religioso judío que hacía de su templo un lugar de perdición olvidándose que era la casa de Dios.
Jesús necesita a sus discípulos, con ellos ora, les enseña a orar y en el monte de los olivos comparte su pensamiento y, porque no, critica a aquellos que no muestran el rostro misericordioso de Dios. Cuando uno reza el padre nuestro en la Iglesia de ese nombre, siente que él nos enseña a orar pero a nosotros nos toca enseñar a rezarlo desde el corazón y la sinceridad de nuestra vida de cristianos.
El culmen de la oración en este día es cuando llegas a Getsemaní y en la Iglesia oras en la piedra en la que Jesús sufrió la agonía de sentirse sólo, únicamente acompañado por la presencia silenciosa pero acogedora del Padre. Cuando besas la piedra sientes el frío de la soledad del sufrimiento, pero también la fuerza que a nuestra vida le da la compañía del amor del Padre.
En el Cenáculo, sucede como decía al principio que la obra arquitectónica nada tiene que ver con el lugar donde los apóstoles cenaron y recibieron al Espíritu Santo, pero eso es lo de menos, lo importante es que cuando lees el evangelio de la última cena o de la venida del Espíritu sobre los apóstoles, o la primera aparición de Jesús a todos ellos reunidos, a uno no le importa el edificio, sino que ese es el lugar, es la tierra donde Jesús hizo lo que allí se lee y te lleva a sentir que también nosotros recibimos el Espíritu, recordamos la misión del servicio de anunciar a Cristo ante el cual no podemos, ni debemos callar.
Termina el día en San Pedro in Gallicantu, lugar del palacio de Caifás y allí ves la escala santa que Jesús la noche del Jueves subió y bajo en varias ocasiones, cuando iba al cenáculo, cuando bajó a orar al huerto de los olivos y cuando lo llevaron al palacio de Caifás y de allí al palacio de Pilatos. Esta escalera sí es de la época de Jesús y cuando visitas la cárcel donde Jesús estuvo en algún momento de esa terrible noche y siente de nuevo el frío de la soledad y el abandono de todos, incluidos aquellos que más cerca estaban de él. Cuando entras a ese agujero sólo cabe orar y reconocer las veces que a lo largo de nuestra vida lo dejamos sólo.
En definitiva éste día a los cristianos que visitamos esta tierra nos fortalece y nos debe comprometer a vivir y sobre todo testimoniar todo aquello que Cristo ha hecho por nosotros, porque es en esta tierra donde él nos los dijo por primera vez.

domingo, 30 de enero de 2011

Primeros días en Tierra Santa


Llegó este viaje como quien no quiere la cosa, el lunes de la semana pasada me confirmaban que venía a Tierra Santa y el viernes montaba en el avión para estas tierras. Me envolvía un doble pensamiento, por un lado todo el mundo decía que esta es una experiencia grandiosa llena de momentos que se viven casi siempre sólo una vez en la vida, que pisas la tierra de Nuestro Señor y que se leen los relatos evangélicos de otra manera como que ves el mismo lago donde pescaron los apóstoles, caminas por los pueblos donde María caminaba, realizaba las tareas de su vida, ves como sería su casa la de San Pedro, se entiende mejor como descolgaron al paralítico, etc. Pero sin embargo cuando me montaba en el avión nada de eso pasaba por mi cabeza, más bien parecía como que me iba de vacaciones a un lugar lejano y sin mayores pretensiones.
Lo cierto es que cuando llegas aquí todo cambia, no de golpe sino como son las obras de Dios, poco a poco. Celebras la eucaristía en la casa de María, o en la de San Pedro. Oras en esa Iglesia que nos recuerda la anunciación del ángel a la Virgen y algo empieza a calentarse en tu corazón. Te sientes un privilegiado y dejas que tus odios vayan llenándose de las palabras de Jesús, que además en esta tierra las vas leyendo como si las escuchases.
No es lo importante la arqueología, no es lo fundamental que las calles por donde caminó Jesús estén a muchos metros de profundidad, lo importante es que es su tierra, su gente con una historia detrás de ellos, una historia de conflictos, pero también una tierra prometida a la que sólo se llega si se tiene esperanza.
Mañana marchamos hacia Jerusalén, estos días hemos estado en Tiberiades, caminando y orando por Nazareth, el lago de Tiberiades, Cafarnaun, el monte Tabor, lugar de la Transfiguración.
Pero si tengo que destacar una pena, es la que he sentido al visitar Naim donde Jesús resucitó al hijo de la viuda. Allí solo hay una pequeña capilla levantada por los franciscanos, la atienden ellos mismos del monte Tabor, pero lo triste es que en ese pueblo ahora mismo no hay ni un solo cristiano, han tirado la casa de la mujer musulmana que tenía la llave de la capilla y todo los alrededores de la capilla son un basurero, donde cada vecino tira lo que le sobra.
Sin embargo al lado puedes ver una mezquita bien cuidada en sus alrededores y limpia por dentro. Esta situación me recuerda que pocos son los cristianos que hay en estas tierras y mucho lo que hacen para que la fe se mantenga en los Santos Lugares, pero en aquellas poblaciones donde no hay presencia cristiana, no tardan en hacer desaparecer todo vestigio de la presencia de Jesús de Nazareth. No es nada nuevo, lo sabemos, los cristianos de esta tierra siempre han tenido que luchar para poder mantener su fe. Por eso ahora más si cabe, la oración por los cristianos perseguidos alcanza dentro de mí un mayor sentido.

domingo, 16 de enero de 2011

¿Donde están los cristianos?


Soy poco propenso a pensar que la Iglesia está siendo perseguida en nuestra sociedad española, siempre digo que lo que nos falta es una mayor presencia de los cristianos en medio de ella y por supuesto el quitarnos la capa de complejos que nos cubre.
En esta semana hemos visto como se ha prohibido la celebración de la Eucaristía en la universidad de Barcelona, bajo el pretexto de no poder proteger la seguridad de los que en ella participasen, acaso puede haber excusa más burda que esa. Las autoridades civiles y de la universidad se han quitado un problema del medio y quizás hayan ganado espacio en la universidad y dentro de poco veamos lo que ahora es capilla convertida en comedor universitario. Y digo yo, los estudiantes y profesores católicos y cristianos de la universidad porque no han hecho una protesta ante el rectorado, o mejor todavía una celebración de la Eucaristía todos los días sin temor a las represalias.
Como digo nos falta a los cristianos creernos lo que somos y mostrarlo, es hora de defender que también nosotros tenemos derecho a vivir nuestra fe de un modo público, igual que se está favoreciendo a otras comunidades religiosas con poco tradición en Cataluña, o debería recordar quiénes son y para que nacen los almogavers (y no me refiero a los ultras del barça).
Pero es que hay más, han estado a punto de cerrar la basílica del Valle de los Caídos, y gracias a la respuesta de los fieles y de la comunidad benedictina ya se está celebrando la Eucaristía en el interior de la misma.
Ahora una obra de teatro donde se burlan de la crucifixión del Señor, subvencionada con dinero de todos y representada en el Centro Dramático Nacional. Tienen que denunciarlo un partido extremista, cuando todas las asociaciones cristianas de Madrid callan, no vaya a ser que las llamen retrogradas.
En definitiva un gobierno como el nuestro que tanto habla de libertades se está cargando la libertad religiosa, y lo que es peor gracias a que los cristianos nos callamos y les dejamos hacer permitiendo que cada vez se vean más comprometidas las prácticas públicas de nuestra fe.
No se trata de enfrentarnos unos contra otros, es hora que los cristianos vivamos nuestra fe sin miedo, denunciemos la hipocresía de los mal llamados progres y perdamos la vergüenza a que nos señalen con el dedo por ser coherentes. Se trata como dice Monseñor Fernando Sebastián en su último libro de que hagamos de nuestras comunidades lugar de evangelización, que hasta ahora no lo hemos hecho y hemos permitido un mundo secularizado y descristianizado. No podemos permitir sin más que los jóvenes construyan su vida al margen de la relación vital con Cristo. Debemos recordar que nuestra gran tarea es la misión en el mundo y para ello necesitamos una conversión personal.